La desaparición de los estudiantes de magisterio de la Escuela Normal de Ayatzinopa (México) ha sido la gota que ha colmado el vaso de la desesperación de millones de mexicanos que llevan decenios soportando la perversión en forma de alianzas entre el crimen y el poder político. La exclusión social de millones de mexicanos, la impunidad y las alianzas del poder con el narco-crimen han llevado a México al borde del colapso.
La desaparición de los estudiantes de magisterio de la Escuela Normal de Ayatzinopa (México) ha sido la gota que ha colmado el vaso de la desesperación de millones de mexicanos que llevan decenios soportando la perversión en forma de alianzas entre el crimen y el poder político.
La exclusión social de millones de mexicanos, la impunidad y las alianzas del poder con el narco-crimen han llevado a México al borde del colapso. Esta semana se ha oído la voz de los Obispos en un documento hecho de mensajes directos.
El ¡Basta ya! de los Obispos se ha sumado al ¡Ya me cansé! de los ciudadanos. México necesita enfrentar la verdad de lo que sucede y reconocer que la desaparición de los jóvenes de Guerrero es expresión fiel del dolor y la injusticia que México sufre y padece.