viernes. 29.03.2024

El ingeniero y experto en atmósferas explosivas Juan Carlos Mañero alerta sobre la importancia de trasladar la protección de los depósitos de combustible contra las explosiones del ámbito militar al civil para evitar accidentes como el ocurrido la semana pasada en el puerto de Sanxenxo (Pontevedra).

 

Las consecuencias de este suceso que se saldó con cuatro heridos tras la deflagración de un barco que repostaba en el Puerto Deportivo de la localidad, ha concretado en una conversación con Efe, se podrían haber reducido gracias a la tecnología preventiva que desarrolla su empresa, y que fue testada por el Ministerio de Defensa en el año 2009. "Con esta tecnología solo se hubiera producido una pequeña deflagración de los gases exteriores, pero nunca afectaría al depósito protegido, generando menores consecuencias", afirma el experto.

 

A pesar de las ventajas de equipar con esta tecnología embarcaciones marítimas, motocicletas o botellas de gas, Juan Carlos Mañero realiza una "labor titánica", en sus propias palabras, para dar a conocer el producto y convencer a las administraciones de que su aplicación en el ámbito civil puede salvar vidas. "Cuando hablo con los técnicos me entienden, pero cuando hablo con políticos no recibo apoyo. Tendrá que ocurrir un accidente con muchos muertos para que comiencen a pensar en una solución", se lamenta.

 

En concreto, la tecnología que ha desarrollado su empresa se basa en la introducción de pequeñas esferas y cilindros de red en depósitos para que inhiban la explosión, un sistema "sencillo" que frena la reacción en cadena que se inicia cuando se genera la chispa, evitando que las moléculas de gas "emitan calor e incendien" a las moléculas contiguas.

 

Reconoce que en otros países como Italia esta tecnología se utiliza para proteger botellas de gas o embarcaciones marítimas, pero en España, abunda, la apuesta por este tipo de sistemas se limita a empresas como la gallega Uro Vehículos Especiales S.A (Urovesa), lo que convierte a la Comunidad "en pionera" en el país en este aspecto.

 

"Para el tema militar no hay problemas de presupuesto, pero a nivel civil suele ser más difícil", apunta Mañero, que reclama la creación de una ley para asegurar que los vehículos susceptibles de sufrir este tipo de accidentes se equipen con sistemas preventivos de manera obligatoria.

 

Su empresa ha conseguido equipar para el Ministerio de Defensa 250 unidades de los denominados Vamtac ST5, fabricados por Urovesa, pudiéndose ampliar su aplicación a un total de 772 de estos vehículos destinados a Afganistán.

 

Hace tres años, inició las gestiones para suministrar este sistema a 734 camiones cisterna del Ministerio, lo que convertiría a su empresa en la "primera del mundo en proteger camiones contra explosiones".

Un experto alerta de la importancia de proteger los depósitos de combustible