La Consellería de Educación ha anunciado que el próximo curso cerrarán trece escuelas unitarias por el bajo número de alumnos presentados, cinco o menos. El departamento de la Xunta recuerda que todos los años revisa la matriculación de los centros escolares en los niveles de infantil, primaria y educación especial, lo que ha llevado a la citada decisión de cierre.
Además, señala en un comunicado que los datos demográficos muestran una caída del número de escolares en la etapa infantil, por la baja natalidad, de manera que en el próximo curso habrá en Galicia 505 alumnos menos que entran en cuarto de infantil (3 años).
En la provincia de A Coruña no han alcanzado el número mínimo de alumnos los centros de Fonte Moura, en Cambre (4 alumnos); de Limodre, en Fene (5); de Tállara, en Lousame (2); de Vilar, en Oleiros, que se integra en el nuevo CEIP de Nós; de Montaos, en Ordes (4); de Souto, en Paderne (5), y el de Loiba, en Ortigueira (3 alumnos).
En Lugo dejan de prestar servicio los centros de Ponte de Doiras, en Cervantes (4 alumnos) y el CEIP Vicente Casabella, en Ourol, cuyo cierre responde a una decisión de las propias familias, ya que ellas, en un total de 8, fueron las que decidieron matricular a sus hijos en el de Viveiro.
En Ourense, también con consenso de las familias, cierra el Nosa Señora do Carme, en Calvos de Randín y sus 7 alumnos pasan al centro de Os Blancos; mientras que, en Pontevedra, dejarán de funcionar los centros de Vide, en As Neves (5 alumnos), el de Samieira, en Poio (3) y el de Pedroso-Bamio (4 alumnos)
