El pleno de Vigo ha dado hoy luz verde, con los votos a favor de PSOE y PP y en contra de la Marea, la aprobación inicial del instrumento de ordenación provisional habilitado por la Ley 2/2017 de acompañamiento de los presupuestos de la Xunta para los municipios con su plan general anulado. Pese a coincidir en el sentido del voto, PSOE y PP se han cruzado reproches a cuenta de la situación del urbanismo en la cuidad desde la anulación por parte del Tribunal Supremo del plan general de 2008, mientras que la Marea ha advertido de que se está sembrando el terreno para la "guerra de trincheras" entre ambos partidos.
La concejala de Urbanismo, María José Caride, ha señalado que la posibilidad de urbanizar, a través de este mecanismo, casi el 24% de la superficie del término municipal es "una muy buena noticia" a la que "algunos quieren ponerle palos en las ruedas", en alusión a la Xunta. Ya de una forma más explícita, tras la intervención de la portavoz del PP, Elena Muñoz, Caride ha tachado de "una vergüenza" que la directora general de Urbanismo, Encarnación Rivas, "viniera a sembrar dudas sobre la aprobación de la ordenación provisional", y ha afirmado que sus argumentos son "una falacia". Se refiere a la exigencia de Rivas de una justificación del sobrecoste en un millón de euros en la contratación de la redacción del nuevo plan general y al requisito aludido por aquélla de que este trámite debe estar resuelto antes de la aprobación definitiva de la ordenación provisional.
"Lo que quería es enredar, generar mala expectativa, -insinuar- que el procedimiento tenía sombras", ha lamentado Caride. Elena Muñoz ha coincidido en que la aprobación inicial de la ordenación provisional es "una buena noticia", pero ha echado en falta el reconocimiento del mérito, por parte del gobierno local, a la Xunta, que es la que habilitó esta herramienta para salvar un urbanismo "herido de muerte". Una situación derivada, según Muñoz, de la "nefasta gestión" tanto del alcalde, Abel Caballero, como de la propia Caride, quien como exconselleira de Política Territorial "metió la pata" y "estropeó" un plan general, el de 2008, que contaba con "el consenso de toda la ciudad".
La portavoz popular ha acusado al gobierno local de ir con lentitud en la aprobación de la ordenación provisional, porque la ley obliga a presentar en el plazo de un año el borrador de un nuevo plan general, y ello coincidiría con las próximas elecciones locales. Muñoz ha concluido que al gobierno local de Abel Caballero "no le interesa" el nuevo plan general, como tampoco "que la ciudad vaya adelante", sino "poner trabas para luego culpar a la Xunta". El portavoz de la Marea de Vigo, Rubén Pérez, ha indicado que este tipo de "improvisaciones" y "chanchulladas" van a "lastrar" el desarrollo futuro de Vigo. Además, Pérez ha hecho hincapié en que esta cuestión servirá de coartada para la "guerra de trincheras" entre PSOE y PP.
Desde su punto de vista, "ni informes Parejo ni ir a Fátima de rodillas (...) no hay más solución para el urbanismo de Vigo que la aprobación de un nuevo plan general". En el turno de cierre, la concejal de Urbanismo ha replicado a Elena Muñoz que el ritmo de la tramitación de la ordenación provisional ha estado condicionada por la recepción de informes de las diferentes administraciones y organismos. Asimismo, le ha indicado a Muñoz que en su hoja de servicios figura "la privatización" del hospital Álvaro Cunqueiro.
