El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, visitó esta mañana la nueva sala de observación del servicio de urgencias del Hospital Clínico de Santiago, que incrementa en 40 camas su capacidad de atención.
La obra se realizó en un tiempo récord, ya que fue tramitada por procedimiento de emergencia ante la situación de la pandemia, lo que obligó a desdoblar este servicio para atender en dos circuitos diferenciados a los enfermos covid y a los de otras patologías. El importe final de la actuación fue de 1.657.362 euros y afectó a una superficie de casi 800 m2, que además de los 40 puestos de atención a los enfermos, acogen un control de enfermería, una zona de preparación de medicación, farmacia, almacenes y baños; así como un área de apoyo con una sala de trabajo para profesionales sanitarios, vestuarios y áreas de limpio y sucio.
El crecimiento de la superficie se desarrolló hacia una zona de terraza exterior. Hace falta destacar que el servicio de urgencias del CHUS atendió el pasado año 155.610 urgencias, tanto pediátricas como de adultos, que cuentan con un espacio totalmente diferenciado. En el recorrido también estuvieron presentes el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, la gerente del área sanitaria, Eloína Núñez, el coordinador de urgencias, Plácido Mayán, y la supervisora de urgencias, Rosa Blanco.
