sábado. 20.04.2024

El conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña, ha avanzado este martes que de la reunión que el próximo viernes mantendrá el comité clínico que asesora a la Xunta en la gestión de la pandemia pueden salir medidas que contribuyan a una reducción mayor de la movilidad en las ciudades de A Coruña y Santiago, donde hay un deterioro de los datos epidemiológicos. "Actuaremos de forma clara" ese día, ha anticipado en una entrevista concedida a esRadio, pero ha indicado que se operará "seguramente" por "edades" y con la vista puesta en determinados "colectivos"; de momento sin más precisión.

 

El responsable del departamento sanitario cree que "casi con toda certeza será así" y de ello se ha hablado con los alcaldes, ha dicho, y también con regidores de estos entornos, pues sobre las comarcas se está llevando a cabo también una especial vigilancia. "La situación en Galicia apunta hacia un crecimiento", ha subrayado García Comesaña, que, con todo, indica que es "asimétrico", pues hay partes "en pequeño descenso" o en "estabilización".

 

La incidencia acumulada gallega es, según los últimos datos, de 201 casos por cada cien mil habitantes a 14 días y de 112,5 a siete, mientras que en España estas cifras son 272 y 141,56, respectivamente. García Comesaña también ha tratado en esta emisora radiofónica la vacunación contra la covid-19 y ha remarcado la importancia de tener en cuenta una reclamación gallega "no atendida" y que considera crucial, pues la Comunidad tiene un 25% de población mayor de 65 años, cuando la media del país es del 20 por ciento. Por estos porcentajes que ha dado, entiende que es imprescindible "tener en cuenta esa proporción".

 

Mañana no se vacuna en la Comunidad porque se está cumpliendo el cronograma de 12.200 por semana, ha explicado el gobierno de Alberto Núñez Feijóo. El principal objetivo ahora es administrar las correspondientes dosis a los "más vulnerables", los usuarios y trabajadores de las residencias de mayores, y si los envíos son "regulares" la Xunta podría revisar la política de reserva de un tercio que a día de hoy aplica al entender que se impone actuar con una "estrategia conservadora". Ha aludido también el conselleiro, ante las preguntas formuladas, a la propuesta de modificación de la ley gallega de salud que se gestiona desde el grupo parlamentario popular para concluir que "la necesitamos".

 

Si se considerase obligatorio el antígeno, por ejemplo, un resorte legal sería la "herramienta" a manejar. Por ahora, ha contado Comesaña que algún empleado de los centros sanitarios no ha querido el antídoto. "Anécdota, de momento", ha dicho, pero no estima que este vaya a ser un hecho residual en el conjunto del territorio en lo sucesivo. De su relación con el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha afirmado que en el plano personal es una persona "muy educada, muy correcta" y que la comunicación, al menos con él, es "fluida" y "permanente".

 

Acerca de su gestión, sí dice que la coordinación "debe mejorar todavía", en aras de ser "más transparente" y con "criterios técnicos" encima de la mesa. Al referirse por último a la ponencia de las vacunas, que trabaja desde septiembre y se reúne todas las semanas, García Comesaña aplaude que hubiese consenso sobre la población más frágil, con la que empezar la inoculación, pero, si bien existe esa "base común", piensa que debe haber más aquiescencias, con las que se evitaría que para todo lo restante cada comunidad aplique "su mejor criterio".

Barajan limitar más la movilidad en Coruña y Santiago, seguramente por edades