El criminólogo Félix Ríos, que el próximo 7 de junio impartirá en Santiago un taller práctico, sostiene que en este país cerca del 50% de las muertes violentas no se resuelven, un porcentaje que evidencia la dificultad que se da cuando el agresor no se entrega o "no es atrapado en ese momento".
El presidente de la Asociación Laxshmi para la lucha contra el Crimen y la Prevención es conocedor de que series televisivas como 'CSI', 'Bones' o 'El mentalista' copan cada semana el "prime time" de las principales cadenas pero, desafortunadamente, la realidad es muy distinta y "nada, nada, se resuelve tan rápido como se ve en la pantalla".
El granito de arena del canario Félix Ríos para intentar mejorar este panorama se llama Prometeo. Es el nombre del principal proyecto del equipo que integra Laxshmi y se ocupa en concreto de la revisión de crímenes y desapariciones, una tarea en la que este especialista trabaja desde hace catorce años, antes de manera individual y desde hace dos en grupo.
Su clase en Santiago se centrará en la Perfilación Criminal, una técnica que dentro de la Criminología Forense permite, mediante la observación e interpretación del escenario de un crimen y de la víctima, identificar física o psicológicamente a su autor o aportar estrategias e ideas para su identificación y captura. En la actualidad, el proyecto Prometeo revisa un total de dieciséis casos, entre crímenes y desapariciones, y lo hace con la colaboración de 40 voluntarios que, de forma totalmente altruista, prestan su ayuda para intentar dar una salida a causas archivadas.
Todo sin ningún tipo de ayuda, ni pública ni privada, al ser esta la única manera de salvaguardar la "objetividad" de un trabajo así. La financiación se obtiene de las clases prácticas, un dinero que les sirve para "gestiones muy puntuales", puesto que es un "montante mínimo". El 99% procede de 'carretera y manta', es decir, de la buena voluntad de "los profesionales que trabajan con nosotros". Observación, interpretación, paciencia y constancia son "claves" para un buen criminólogo. Lo explica Félix Díaz en estos talleres, que ya han recorrido catorce ciudades españolas.
En ellos, emplea casos reales y los participantes utilizan su capacidad deductiva a raíz de cada uno de los elementos que van conociendo. Estudiantes de Criminología y Psicología Criminal, miembros de las fuerzas de seguridad, y profesionales vinculados al mundo jurídico y forense en general... Estos son los perfiles de los asistentes a este tipo de seminarios en los que, en cuatro horas, quedan desgranadas las principales técnicas criminológicas vigentes.
"Lo que nosotros le damos a los asistentes son estrategias para que ante un caso cualquiera puedan aplicar la técnica del perfil criminal y reconstruir un crimen, y que lo puedan hacer bien y de forma coherente", detalla Ríos. Durante su estancia en Santiago, los miembros de la Asociación Laxshmi visitarán el Laboratorio de ADN Mitocondrial y esperan contactar con el genetista y experto en medicina forense Ángel Carracedo, con el fin de que pueda prestar su colaboración en futuras investigaciones.
Laxshmi ofrece la posibilidad a las familias de contar con un equipo multidisciplinar para valorar la posibilidad de reabrir un caso no resuelto en los últimos veinte años, y por el momento, las estadísticas que barajan son muy favorables, ya que "uno de cada dos casos que revisamos conseguimos reabrirlo", manifiesta Félix Ríos. Los grandes avances realizados en los últimos años en técnicas como el estudio del ADN mitocondrial, las autopsias o la ciencia forense en general facilitan la obtención de "respuestas" que antes no eran factibles.
En esta ardua tarea trabajan mano a mano con los funcionarios públicos encargados de resolver estos casos, de quienes reciben normalmente apoyo y colaboración para "cerrar una herida y un expediente abierto", aunque "siempre hay excepciones" que dificultan esta labor.
El Proyecto Prometeo ha logrado reabrir casos tan conocidos como el de Soledad Donoso, la joven cordobesa de 18 años desaparecida en 1992 y cuyo cadáver fue localizado en la orilla del río Guadalquivir. Y en su palmarés se encuentra también la reapertura de la investigación del triple asesinato de Burgos, nueve años después, o del caso Macastre, coetáneo al de las niñas de Alcàsser.
El criminólogo alude al crimen de Asunta Basterra como uno de los ejemplos en los que podrían posicionarse como acusación particular, siempre con el objetivo de asegurarse de que "los sospechosos cumplan condena por lo que han hecho", un derecho constitucional de todos los ciudadanos "aunque no se suela ejercer".
Prometeo cuenta hoy con dos peticiones de reapertura de casos en Galicia, un posible homicidio vinculado con una desaparición y un caso dictaminado por la Administración como muerte accidental. La lista de solicitudes es amplia pero "para poder ayudar bien a una familia hay que optimizar recursos y centrarse en una serie de casos", puesto que resulta imposible ayudar a todo el mundo, porque "al final, no ayudarías a nadie", concluye.
