Los trabajadores de la empresa Catering de Caranza han protagonizado esta mañana un escrache al dueño de la firma ante la puerta de su casa, en las viviendas conocidas como Las Torres, en el municipio coruñés de Narón.
Un grupo de empleados, arropados por el sindicato CIG, se concentraron en los bajos del inmueble delante de una peluquería, en la calle A Garda, y desplegaron la megafonía para llamar la atención sobre las nóminas que el empresario debe, denuncia el sindicato, a su personal desde hace unos cuatro meses.
"Es para exigir el pago de las cuatro nóminas atrasadas que le debe al personal e informar a los vecinos de la clase de persona que vive a su lado", manifestó una portavoz de la CIG Servicios en Ferrolterra. Acusan al empresario de cobrar pagos que no declara "sin marcar el dinero en la caja y mantener su alto nivel de vida" a pesar de las deudas contraídas con sus trabajadores.
Esta empresa se ocupa del servicio de comidas del Club de Oficiales y Suboficiales de la Armada en El Montón. La CIG señala al propietario, Emilio Rodríguez, como responsable de los atrasos y pide al Ministerio de Defensa, que licitó la concesión, que tome medidas. El escrache, al que se sumaron una docena de personas, se mantuvo durante un tiempo prolongado a primera hora de la mañana.
