El vicepresidente de la Diputación de Lugo, Argelio Fernández Queipo, expresó su satisfacción por el hecho de que la Audiencia Provincial exculpase al ex alcalde de Lugo, José López Orozco, en una de las piezas principales de la Operación Pokemon, pero también recordó que "el daño ya está hecho" y que "no se le van a pedir cuentas" a quien decidió su imputación.
A su juicio, a la vista de la resolución de la Audiencia Provincial, queda probado que la imputación de Orozco es "algo que nunca tendría que haberse producido", por lo que sostiene que "la Justicia tendría que funcionar de una forma distinta a como funciona a veces".
Desde su punto de vista, esa forma "de funcionar" puede llegar a "entorpecer la vida pública" y hace que determinadas personas que "podían seguir dándole mucho a la sociedad" se vean "apartadas en un momento dado" a causa de una imputación. De hecho, afirmó que, en el futuro, otras personas que también han visto frenada su carrera política a causa de su condición de investigadas en una causa penal "serán desimputadas".
