La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha lamentado que la Xunta haya decidido cerrar bares y restaurantes en gran parte del territorio por la pandemia de la covid-19, pero mantenga abiertos los prostíbulos. En una conferencia de prensa, Silva ha reiterado que estos establecimientos de alterne "hay que cerrarlos", una medida que desea que se produzca "para siempre".
"Es un escándalo. Me indigna. Nadie habla de los prostíbulos abiertos", ha asegurado la presidenta provincial, que ha censurado el "silencio" sobre estos locales ante las nuevas restricciones. Silva ha indicado que la Xunta debe compensar al sector de la hostelería con ayudas económicas "cuanto antes", ya que si no adopta ahora esas medidas "después será imposible rescatarlos" porque corren el riesgo de "irse a la ruina". Silva también ha expresado el respaldo a las decisiones que contribuyan a evitar un "colapso" del sistema sanitario en Galicia "y no hacer críticas que no estén basadas en intentar apoyar", ha dicho.
"Haciendo críticas continuadas y no basadas en ningún argumento lógico no se avanza y se generan inquietudes que son absolutamente injustas", ha comentado la dirigente socialista que ha expresado su esperanza de la Xunta abandone la "confrontación" con el Gobierno central sobre las medidas contra la pandemia de covid-19 A este respecto, ha indicado que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "fue el primero en poner el grito en cielo" tras el anuncio de la prolongación del estado de alarma "y ahora es el primero en usarlo" para estas nuevas medidas restrictivas.
Sin embargo, la presidenta de la Diputación de Pontevedra espera que el Gobierno gallego "escuche también a las entidades locales" y éstas dejen de enterarse de sus decisiones a través de los medios de comunicación, porque "tenemos mucho que decir", ha apostillado.
