El hospital comarcal Virxe da Xunqueira de Cee (A Coruña) no registra desde el pasado domingo ningún ingreso por coronavirus, una situación óptima favorecida por su estructura poblacional dispersa y por el confinamiento y que, para mantenerse de cara al futuro, obliga a extremar las medidas de protección.
"Si algo ha demostrado esta enfermedad es que el futuro es incierto porque depende de que seamos capaces de protegernos y de que seamos escrupulosos en el cumplimiento de las medidas sanitarias", asegura en una entrevista con Efe la gerente de este hospital, Carmen Otero. Otero (Santiago de Compostela, 1959), médico de profesión, dirige desde 2017 el Hospital Virxe da Xunqueira, con una población de referencia de 37.000 personas y una capacidad de 76 camas, a algo más de una hora de distancia de grandes ciudades como A Coruña y Santiago.
Desde el pasado 14 de marzo, casi a la par que el confinamiento, ha tenido 31 pacientes ingresados por COVID-19 hasta el pasado domingo, cuando inició el ansiado camino de cero ingresos por esta enfermedad. "Es una muy buena noticia", subraya la gerente de este hospital coruñés, donde no hay población agrupada como en las grandes ciudades y el entorno rural y costero se encuentra disperso. "Esto ha favorecido" la buena evolución de la enfermedad en la zona, donde el número de contagios ha ido disminuyendo progresivamente.
Del total de pacientes ingresados, el pico máximo se registró la primera semana de abril, con 14; siete fueron trasladados al CHUAC porque requerían ingreso en UCI y nueve fallecieron, mayoritariamente por encima de los 70 años y con patologías previas, sobre todo respiratorias, cardiovasculares y de déficit cognitivo. Desde el pasado domingo no registra ingresos por COVID-19, una situación en la que también se encuentra el hospital de Monforte; los demás hospitales comarcales gallegos sí tienen este tipo de pacientes y así, en el del Barbanza hay siete, en Valdeorras seis, en Verín cuatro, al igual que en A Mariña, y en Salnés dos.
Otero, licenciada en Medicina y Cirugía por la USC y médico en los hospitales de Ferrol y Santiago antes de llegar a Cee, detalla que en el área de influencia del Hospital Virxe da Xunqueira se han realizado 1.370 pruebas, de las que resultaron 138 pacientes positivos, más del 70 % mayores de 70 años. Casi todos siguieron un control y seguimiento domiciliarios excepto los 31 que fueron ingresados en el hospital.
"Es posible que la situación se mantenga bajo control y con una incidencia baja, sería muy optimista pensar que en Cee se va a acabar una enfermedad pandémica, no se puede ser triunfalista", añade Otero sobre la ausencia de pacientes COVID en este hospital. Lo realmente deseable, continúa, es "que las cosas sigan yendo como hasta ahora, aunque algún paciente pueda necesitar un ingreso puntual".
De cara al futuro, la gerente de este hospital coruñés aconseja "ser muy prudentes, extremadamente prudentes", pues los datos indican que en esta zona eminentemente costera de la provincia de A Coruña están disminuyendo los contagios y los pacientes en seguimiento. "Son unos datos buenos pero no pueden hacer que nos confiemos", enfatiza Otero, que insiste en respetar las medidas de distancia social, lavado de manos y en lo posible el uso de mascarillas.
Además, es partidaria de que el aislamiento social "se reduzca de forma paulatina y muy prudentemente". En definitiva, advierte de que "de no ser así, de no seguir las medidas aconsejadas, se podría producir un repunte de la enfermedad en cualquier momento". Por ello, reitera la necesidad de "ser muy cuidadosos, lo que redundará en la salud de todos y que podamos estabilizar estos datos de cara al futuro para intentar, paulatinamente, recobrar la normalidad en nuestra vida diaria".
