jueves. 18.04.2024

La recuperación social y económica del Couto Mixto, un enclave "olvidado" entre Galicia y Portugal afectado por la despoblación, ha sido hoy debatida en el Senado gracias al PSOE, pero su moción no ha podido aprobarse porque el PP quiere que esta exigencia se vea antes en el Parlamento gallego.

 

Los 13 votos en contra registrados en la Comisión de Justicia han doblegado a la unión de PSOE y Podemos (ocho votos a favor) y han dejado pendiente una iniciativa presentada por el senador socialista Luis García Mañá. Nacido en Ourense, electo por esta circunscripción, García Mañá se ha caracterizado durante la legislatura por promover iniciativas (en su mayoría preguntas por escrito al Gobierno) sobre la situación demográfica de Galicia, cuyos núcleos rurales se están vaciando de gente. La Federación Española de Municipios y Provincias precisó en un reciente informe, redactado sobre datos del Instituto Nacional de Estadística, que cerca de 4.000 municipios de toda España están hoy en riesgo de extinción por la pérdida de población.

 

Galicia es una de las comunidades más afectadas por la caída demográfica, y el Couto Mixto una de sus zonas particularmente vacías, de ahí la moción de García Mañá. Se trata de una especie de "Andorra gallega", en palabras del senador, con una extensión de no más de 30 kilómetros, la mayoría situados en Ourense salvo una estrecha franja del norte portugués. Sus municipios principales son Meaus, Rubiás y Santiago de Rubiás. La ubicación ha sido fuente de numerosos conflictos fronterizos.

 

Recuerda el parlamentario socialista en el texto de la moción que el Tratado de Lisboa de 1864 acabó con siete siglos de disputas, pues Portugal cedió a España los derechos sobre el Couto Mixto y España a Portugal, los municipios de Souteliño, Cambedo y Lamadarcos, los llamados "pueblos promiscuos", los tres en la línea de frontera. Los habitantes del Couto disfrutaron de una serie de privilegios a partir de entonces, como elegir a su propio alcalde, no pagar tributos ni en España ni en Portugal, quedar exentos del ingreso en los ejércitos o circular por el camino a la portuguesa Tourem al margen de la autoridad, pues ni se podía actuar contra ellos ni se les podía aprehender las mercancías.

 

Pero el Couto, hoy, es un enclave situado en el "olvido", escribe Mañá. La reivindicación de esta tierra se coló en la actualidad parlamentaria en 2007, cuando dos proposiciones no de ley en el Congreso de los Diputados y en el Parlamento de Galicia abogaron por reconocer "la singularidad del Couto Mixto como enclave histórico y cultural". Para ello, instaban a tomar medidas que permitieran su "desenvolvimiento social y económico". Siete años más tarde, los habitantes de las casi fronterizas Táliga y Olivenza, en Extremadura, pudieron optar a la doble nacionalidad española y portuguesa, algo con lo que ya contaban los residentes de los "pueblos promiscuos".

 

Durante el debate en la Comisión, el senador socialista ha solicitado al Gobierno que trabaje por permitir también la elección de la doble nacionalidad a los habitantes del Couto, pues necesitan "mejorar su nivel social y económico" en un contexto de "trágica merma demográfica". Por ello, ha pedido al Gobierno que, en colaboración con la Xunta, no sólo ponga en marcha medidas para el reconocimiento del papel histórico y cultural del Couto, sino también para su desarrollo socioeconómico. El grupo popular ha abogado por consensuar tales medidas en Galicia antes de trasladarlas a las Cortes Generales, lo que, si ocurre, convertiría en "irrechazable" cualquier moción que pretenda rescatar del olvido el Couto.

Recuperar el "olvidado" enclave Couto Mixto, asunto pendiente en el Senado