La Policía Local de Lugo detuvo a un individuo, al que previamente había visto tomando el sol en un banco en compañía de su pareja, después de que ambos entrasen en un supermercado y se pusiesen a tocar los alimentos sin respetar las medidas de higiene ni guardar la distancia de seguridad con otros clientes, además de hacer caso omiso a las indicaciones del personal y acabar insultando a los agentes policiales.
Los hechos sucedieron el sábado pasado, sobre las cinco de la tarde, cuando una patrulla de la Unidad Territorial de Policía de Barrio vio a una pareja que estaba tomando el sol en un banco en la calle Montero Ríos.
Al identificarlos, comprobaron que ambos tienen su residencia en el municipio lucense de Guiririz, de modo que al no justificar el motivo por el que se encontraban en la vía pública, fueron informados por los agentes de que iban a ser denunciados por incumplir las medidas decretadas en el estado de alarma, además de conminarlos a marcharse a su casa.
Sin embargo, pasados unos minutos, personal de un supermercado próximo llamó al 092 para informar de que había entrado en el establecimiento una pareja que estaba “manipulando los alimentos, sin las medidas de higiene” establecidas, sin respetar las normas de seguridad y sin hacer caso alguno a las indicaciones de los empleados de la tienda.
Los agentes comprobaron que era la misma pareja que había sido denunciada en Montero Ríos y que, por lo tanto, había desobedecido la orden de confinarse en su casa. Al ver los agentes, el hombre se negó a salir del establecimiento y comenzó a insultar “al Gobierno” y a los propios policías, por lo que fue inmediatamente detenido y trasladado a la comisaría de la Policía Local, donde se instruyen diligencias para el Juzgado de Guardia por un delito de desobediencia.
