viernes. 29.03.2024

La Guardia Civil ha detenido a un joven de 26 años, vecino del municipio lucense de Trabada, que prendió fuego a su coche en una zona boscosa de la localidad vecina de Lourenzá tras haber huido del lugar de un accidente de tráfico unos días antes. Los agentes tuvieron conocimiento de un accidente acontecido el martes 11 de agosto a las 20:10 horas en el casco urbano de la localidad, en el cual uno de los dos vehículos implicados, un turismo de color azul, se dio a la fuga. Tras personarse la patrulla en el lugar de los hechos y auxiliar al otro conductor, se iniciaron las gestiones oportunas para localizar al vehículo y al conductor fugado.

 

Después de averiguar la identidad del titular del turismo, los agentes de la Benemérita localizaron al mismo en un establecimiento de hostelería del municipio, coincidiendo “tanto la vestimenta como la descripción física del conductor huido con las del titular”. Este individuo negó en todo momento ser el conductor del turismo, asegurando que “le habían robado el coche” y que “desconocía el paradero del mismo”, pero que “todavía no había denunciado el robo ante las autoridades competentes”. Tras “varias incongruencias y respuestas erráticas” del joven, los agentes sospecharon que “huyó del lugar”, dado que su turismo carecía tanto del seguro obligatorio como de la inspección técnica de vehículos en vigor.

 

Dadas estas circunstancia, la Guardia Civil decidió crear una línea de investigación en torno a la persona titular del turismo, quien además poseía antecedentes policiales por varias infracciones de la seguridad vial. El jueves 13, sobre las 21:00 horas, se localizó en una zona boscosa de difícil acceso próxima a Lourenzá un vehículo “completamente calcinado”, cuya carrocería y número de bastidor “coincidían con las del vehículo implicado en el accidente y que posteriormente se dio a la fuga”. Además, su titular aún no había interpuesto denuncia por el “supuesto robo” que afirmaba haber sufrido hacía ya dos días. Un día más tarde, el viernes 14, se personó el propietario del vehículo en dependencias de la Guardia Civil, con la intención de presentar denuncia por el robo del vehículo, tras lo que fue informado del suceso acontecido.

 

Los agentes también advirtieron al joven de que, tras la “pertinente inspección ocular”, determinaron que el fuego fue “claramente intencionado” y que, a pesar de “haber pretendido borrar cualquier prueba o vestigio”, la llave del coche se encontraba “introducida en el bombín del contacto” y el turismo “presentaba daños en la aleta delantera derecha”, correspondiendo con el accidente en el que se había visto implicado, además de “haber intentado dejar ilegible el número de bastidor”. Después de esta explicación, los agentes le comunicaron al joven que existían “indicios suficientes” para considerar que él era el conductor implicado en el accidente y que la interposición de la denuncia que pretendía presentar podría implicar la comisión de un delito por denuncia falsa.

 

En ese momento, el joven manifestó haber sido el conductor en el momento del accidente, e indicó que huyó del lugar por carecer de seguro e ITV. También relató que, tras el siniestro, ocultó el vehículo en “una zona apartada”, para “el día siguiente, de noche y antes de la madrugada” salir de su domicilio “con una garrafa de gasolina” y prenderle fuego al coche, con la “clara intención” de que “no pudiera relacionársele a él con dicho accidente”. Por estos hechos, se le instruyeron un total de seis infracciones administrativas en materia de seguridad vial y también en legislación medioambiental, por el “abandono de vertidos incontrolados de residuos peligrosos”.

Un joven de Trabada prende fuego a su coche tras huir de un accidente