El comisario de la Policía Nacional de la provincia de Ourense, Juan Carlos Blázquez, ha manifestado hoy que el caso por la muerte de Socorro Pérez, cuyo cuerpo apareció con signos de violencia en 2015, “sigue vivo” y prueba de ello dijo que es la presencia en la provincia de investigadores de la Brigada Central de Homicidios para buscar nuevas pistas sobre este caso. Con motivo de la visita a la comisaría del nuevo subdelegado de Gobierno, Emilio González Afonso, Blázquez ha revelado la llegada “justo esta mañana” de investigadores procedentes de Madrid para continuar con el trabajo de campo que permita llevar al esclarecimiento del crimen.
“Es un tema que sigue vivo; hay varias líneas de investigación que se siguen trabajando sobre el terreno”, ha explicado el mando policial, y ha aclarado que no dan el caso por cerrado “mientras el tema no esté solucionado”. El pasado mes de junio, el magistrado del Juzgado de Instrucción número 2 de Ourense había acordado el “sobreseimiento provisional” de las diligencias ante la falta de pruebas. Pese al archivo provisional, la Policía mantiene abierta “la investigación” a fin de conseguir hallar una pista que lleve a los responsables del crimen, sin descartar ninguna línea de investigación, expuso Blázquez, y añadió que solo en la revisión de conexiones telefónicas, la Policía analizó "uno a uno" tres mil teléfonos.
Por otra parte, ha indicado que en caso de que haya una investigación “sólida y suficientemente potente” que de un giro al caso propondrán al juez la reapertura de la causa. En diferentes ocasiones, la familia criticó la investigación policial y la falta de medios, especialmente en un primer momento, en que apareció el cuerpo, respecto a otros casos de mayor trascendencia mediática, y pidió que se pusiesen “todos los medios técnicos, humanos y científicos” para hallar al asesino o asesinos de Socorro Pérez.
“Fue una pena que al principio no contáramos con elementos que hubieran ayudado, como encontrar el cadáver con anterioridad, y no tuviéramos unas circunstancias climatológicas mejores, que eran muy adversas", ha apuntado el mando. Por el momento, la policía no descarta “absolutamente ninguna línea” de la investigación, incluida una posible agresión sexual que les llevó a rastrear bases de datos de personas con antecedentes.
