La Guardia Civil ha detenido a un repartidor al que acusa de apropiarse de paquetes que transporta la empresa para la que trabaja y vender su contenido a un valor inferior al de mercado en un local de restauración de Salvaterra de Miño (Pontevedra), cuya propietaria también ha sido arrestada. Entre los efectos intervenidos figuraban teléfonos móviles, cámaras de vídeo, tabletas electrónicas, juguetes, colonias, televisores, productos de alimentación o una bicicleta de montaña.
La investigación, que partió de varias denuncias por el extravío de paquetes enviados a través de una empresa dedicada a este servicio, descubrió que el detenido, de 42 años, no los pasaba por el lector de códigos de barras, por lo que no constaban en la hoja de reparto. En el momento de su detención fue sorprendido en el interior de la empresa cuando manipulaba varios paquetes.
La Guardia Civil acusa a la propietaria del bar donde luego se vendían los efectos intervenidos, de 36 años, de estar conchabada con aquel para montar una suerte de mercadillo en su establecimiento. Las diligencias instruidas fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción número 3 de Ponteareas, que ordenó su puesta en libertad con cargos.
