Llegan a Cedeira desde Galicia, el resto de las autonomías de España y también desde Brasil y Francia para unir sus vidas por el rito celta. Son 52 personas, 26 parejas, las que contraerán matrimonio este fin de semana (días 29 y 30) con una pintoresca ceremonia que oficia Manuel Aneiros, autodenominado druida Aneiros dos Ártabros, coincidiendo con el Lugnasad, una fecha señalada en el calendario anual para los pueblos atlánticos.
La localidad coruñesa de Cedeira, situada en la costa más septentrional de la provincia, acoge este fin de semana una nueva edición del Lugnasad, que recoge los ecos de un antiguo ritual celta y que se escenifica entre el pinar y la playa de A Magdalena. Además de las bodas celtas, la tradición se revive con un programa de actividades para todas las edades y públicos que arranca el viernes a las 17:00 horas con juegos para los más pequeños como la caza del jabalí o el 'oso al caldero'.
Antes de su boda, las 26 parejas que ya figuran inscritas para el rito celta, se reunirán la noche del viernes en el campo para sumarse a una queimada multitudinaria. El sábado a mediodía, desfilarán por las calles de la villa y participarán en los juegos y actividades hasta la ceremonia, a las 23:00 horas, sobre el arenal.
Como en cualquier ceremonia, el rito estará seguido de una buena comilona. El compromiso del casamiento celta dura lo que dura el invierno y puede romperse al cabo de un año o renovarse para el verano siguiente. Estos festejos, que se celebran en Cedeira desde 2009, congregan cada agosto a centenares de turistas y curiosos. Cuentan con el respaldo del Ayuntamiento, la banda de gaitas Robaleira, y la Sociedade de Caza y Pesca Cedeira-Cerdido, además de los aportes que hacen empresarios locales, hosteleros y vecinos a título particular.
