viernes. 29.03.2024

Un hombre acusado de abusar sexualmente de una menor en repetidas ocasiones en Fisterra (A Coruña), aprovechando la relación de confianza que tenía con su familia, ha asegurado en el juicio que "jamás" le ha realizado tocamientos.

La sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña celebra este miércoles el juicio contra el varón sospechoso de un delito de abuso sexual, para quien la Fiscalía demanda seis años de prisión y ocho años de libertad vigilada.

En la sesión, el acusado ha alegado que "nunca" se quedó solo con la niña en su casa, ni estuvo "al cuidado" de ella. "Ni a ella ni a nadie", ha respondido a la pregunta de si le hizo tocamientos a la menor.

En este sentido, ha dicho que "nunca" abusó de ella y ha atribuido unos mensajes que envió a la afectada a una "confusión", ya que pretendía enviárselos a otra persona.

Según relata el Ministerio Público en su escrito de calificación, desde fecha que no ha podido ser determinada pero a partir del año 2012 y hasta al menos el año 2016, el encausado ha realizado a la víctima "tocamientos por todo su cuerpo" prácticamente "cada semana".

Asimismo, añade, la afectada ha realizado al acusado tocamientos, bajo promesas de dinero o advirtiéndole que de no hacerlo perdería la relación con su amiga (hija del sospechoso), todo ello "con el firme propósito de satisfacer sus lúbricos instintos y sin que la menor estuviese conforme".

Para tal fin, el acusado, "aprovechando la estrecha relación de confianza y trato que mantenía con la familia de la menor" se quedaba solo o al cuidado de la niña, lo que le permitía llevarla la mayor parte de las ocasiones a su domicilio, donde realizaban los contactos sexuales.

A causa de estos hechos, asegura el fiscal, la menor sufre "múltiples alteraciones en su ánimo" que le provocan dificultades para dormir, miedo intenso, ánimo decaído, ansiedad, sentimientos de culpa o vergüenza.

La Fiscalía pide que el acusado abone 15.000 euros a la víctima en concepto de responsabilidad civil.

Acusado de abusar de una menor en Fisterra (A Coruña) niega haberla tocado