El juicio contra una persona que vendió, presuntamente, un inmueble que no existía en la localidad coruñesa de Laracha ha sido aplazado por la ausencia de un testigo clave. Un hombre, con antecedentes penales por estafa según la calificación del Ministerio Fiscal, se iba a sentar hoy en el banquillo de los acusados de la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña junto a una segunda persona que falleció.
La Fiscalía opina que estas dos personas utilizaron la documentación de un edificio que se construía en Laracha con ocho viviendas para negociar, el 18 de septiembre de 2007, una venta de 366.000 euros, de la que fueron entregados 69.600 en un primer plazo. En realidad se utilizaba la documentación de un edificio, que los clientes fueron a ver en persona, pero según el fiscal lo que se vendió fue la parcela de enfrente, que se encontraba totalmente vacía.
En su opinión se trata de un delito de estafa por lo que pide para el acusado tres años y seis meses además de una multa de 5.000 euros y una indemnización de 69.600, penas que se pedían para ambos hasta el fallecimiento del otro acusado. La ausencia de un testigo clave que participó de manera directa en las negociaciones de compraventa del inmueble ha provocado que el magistrado Luis Barrientos aceptase el aplazamiento del proceso "en aras de una más correcta celebración de la causa".
Como "no es un testigo irrelevante" se tendrá que certificar el paradero de esta persona y si no se encuentra "se podrá hacer uso de ese testimonio por la vía de la lectura de la celebración sumarial".
