El asesinato de Samuel el pasado sábado en A Coruña ha conmocionado al arco político y a la sociedad española por su brutalidad, "fue un acto salvaje y despiadado", ha dicho este lunes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y ha sacado a la calle desde entonces a miles de personas para condenar el crimen.
Este lunes por la tarde los coruñeses han abarrotado la plaza de María Pita para exigir "justicia" para este joven, de 24 años y auxiliar de enfermería en la Institución Padre Rubinos.
También en la Puerta del Sol de Madrid una concentración multitudinaria y emotiva ha reclamado justicia para Samuel, al igual que en Barcelona.
Otras localidades gallegas como Culleredo o Vimianzo (A Coruña) han mostrado en la calle su repulsa por este asesinato, Pontevedra se ha pronunciado en el mismo sentido, al igual que Santiago, Vigo o Ferrol, y ayer sus amigos homenajearon a Samuel en Madrid.
En Estrasburgo (Francia), una treintena de eurodiputados, la mayoría españoles, se concentraron en el patio de la sede del Parlamento Europeo para condenar la brutal agresión, y las redes sociales han llenado su espacio virtual con declaraciones en este sentido.
Además, los tres grupos parlamentarios en Galicia, PPdeG, BNG y PSdeG, ha coincidido en condenar el asesinato de Samuel y la violencia en general, al tiempo que han pedido que se investigue y se aclaren los hechos.
Una brutal paliza acabó con su vida en la madrugada del sábado en las inmediaciones de una discoteca de A Coruña, tras una discusión que pudo originarse por el uso de un teléfono móvil.
Por el momento, la policía mantiene abiertas "todas las vías" para esclarecer este crimen por el que este lunes se ha continuado tomando declaración a los testigos, sin que por el momento se hayan producido detenciones, aunque ayer una fuente policial informó erróneamente de 13 arrestados.
"Hay ciertas identificaciones" ya tras lo sucedido, ha subrayado este lunes el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, si bien continúa el proceso de toma de información tras la declaración de los testigos y el visionado de los vídeos de la paliza que recibió el joven.
Después, ha continuado, "sabremos si se trata de un crimen homófobo o no", como se ha denunciado en las redes sociales y claman los colectivos LGTBI; no obstante, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska ha dejado claro que "no está excluida ninguna hipótesis, ni el delito de odio ni cualquier otro".
El presidente del Gobierno Pedro Sánchez confía en que la investigación policial identifique "pronto" a los autores del asesinato, para lo que, sostiene el ministro, la Policía Nacional trabaja "de forma exhaustiva para, en la mayor brevedad posible, esclarecer los hechos, saber cuál es la naturaleza de los mismos" y detener a los autores.