Este lunes, el personal de la cofradía de Noia detectó un ejemplar de arroaz muerto dentro del puerto de Testal. En un principio se pensó que se trataba de CONFI (también conocido como Manoliño), pero la identificación del sexo del ejemplar, una hembra, permitió descartar que se tratara de su cuerpo, ya que CONFI es macho. Poco después de las 9:00 de la mañana, la ballena CONFI fue avistado en el puerto de Freixo, descartando cualquier sospecha.
Los equipos de especialistas de la Red de Varamientos de Galicia, gestionada por CEMMA, se desplazaron a Testal para verificar la identidad del cuerpo e investigar las causas de la muerte. La Red de Varamientos de Galicia cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica, a través del proyecto Revargal financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU mediante el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), y con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia.
El arroaz era un ejemplar hembra adulta de delfín mular (Tursiops truncatus) en periodo de lactancia. Su muerte presentaba signos de enfermedad aún por determinar. Los equipos recogieron datos y muestras para determinar la causa de la muerte a través de análisis específicos.
CONFI (también conocido como manoliño): se insiste en recomendar a los bañistas mantener distancia con el cetáceo.
Aunque CONFI esté solitario, debemos recordar que es un animal salvaje, una especie protegida como vulnerable en la lista de especies amenazadas. Debemos respetarlo y proporcionarle la mayor tranquilidad posible. Se puede observar desde la costa, acompañando una embarcación, etc., pero siempre debemos mantener una distancia prudente necesaria para la seguridad de ambos.
El contacto con un cetáceo puede tener consecuencias directas en cuanto a la seguridad física y la salud. Los humanos pueden causar daños en la piel del animal con las uñas, aletas u otros elementos duros que entren en contacto. Los delfines son animales muy grandes, se estima que pesan alrededor de 300 kg, y son muy fuertes, por lo que incluso pueden golpear involuntariamente. Al ser mamíferos, existe el riesgo de contraer enfermedades pulmonares y epidérmicas en el contacto directo.
