sábado. 20.04.2024

Un hombre que fue víctima de un supuesto intento de homicidio por atropello de un varón que no había pagado en la gasolinera ha explicado este miércoles que en aquel momento solo pensó "en poner las manos sobre el capó y levantar las piernas".

La sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña acoge hasta el jueves un juicio contra un varón de veintiocho años al que la Fiscalía acusa de los delitos de homicidio en grado de tentativa, robo, estafa y conducción ilegal por unos hechos que supuestamente ocurrieron el 18 de febrero de 2020, por los que pide más de nueve años de prisión.

El procesado solo ha respondido a las preguntas de su abogado y ha negado su participación en cualquiera de los hechos, ocurridos entre Ferrol y A Laracha aquel día.

La víctima del atropello ha explicado que aquel día se acercó un vehículo a repostar y el conductor le solicitó cincuenta euros de combustible mientras "hacía como que estaba hablando por teléfono".

"Cuando colgué la manguera y cerré el depósito, el coche salió huyendo sin haber abonado el combustible, claro. Mi reacción fue salir corriendo detrás del coche, una reacción absurda. El vehículo salió de la estación en dirección hacia Carballo (giro antirreglamentario). Mi reacción fue correr hacia la carretera por donde iba él. Al pasar el último surtidor de gasolina, vi que el vehículo había girado, había vuelto a entrar", ha detallado.

Ha desvelado que su instinto de perseguir al vehículo estuvo motivado en que, en caso de impago, tendría que hacer frente personalmente a la cantidad repostada, pero un momento después comprobó que el coche se dirigía directo hacia él.

"Lo único que se me pasó por la cabeza -agrega- es que no me daba tiempo a esquivarlo, entonces lo que hice fue poner las manos sobre el capó y levantar las piernas. En ese momento, por mi cabeza, solo pasaba el 'no soy capaz de esquivarlo'", ha enfatizado.

Intentó esquivar el coche pero no lo consiguió y, ya en el suelo, intentó arrastrarse hacia los surtidores pero no era capaz de moverse, dadas sus numerosas lesiones.

Un compañero de trabajo del atropellado ha explicado, tras un biombo para proteger su identidad, lo que vio aquel día en la gasolinera, tanto a preguntas de la Fiscalía como de la defensa del procesado.

"Venía de cobrarle a un cliente y veo un coche rojo aparcado y a mi compañero echándole combustible. El coche sale a toda pastilla de allí y al llegar a la salida coge la dirección opuesta a la salida, pero a continuación hace un giro y entra de nuevo a la estación de servicio. El compañero se quedó mirando", ha detallado.

"El coche -añade- entra más rápido de lo habitual en la gasolinera, mi compañero sale hacia el final de la gasolinera y el coche, en vez de parar, sigue, aceleró. Mi compañero puso las manos encima del capó y ya lo vi volar", ha proseguido.

El Ministerio Fiscal acusa a este varón de Carballo, de veintiocho años, Según el escrito de acusación, aquel día el procesado había quedado con un hombre en el aparcamiento de un centro comercial del polígono de A Gándara, en Ferrol, para ver un coche que estaba a la venta, pero bajo el pretexto de probarlo, cuando estuvo sentado en el asiento del conductor, se fugó con el vehículo.

La Fiscalía añade que, con el vehículo robado, el procesado supuestamente se dirigió a A Laracha, donde intentó repostar en una gasolinera sin intención de pagar, pero no se lo permitieron.

A continuación se dirigió a una segunda gasolinera, donde, de nuevo de acuerdo al escrito de acusación, repostó, se fue sin pagar y, cuando su actitud fue reprochada por un empleado, lo atropelló con intención de matarlo, por lo que le dejó numerosas secuelas.

Por estos supuestos hechos, la Fiscalía pide nueve años de prisión por el delito de homicidio en grado de tentativa, además de otras penas menores por el resto de delitos, junto con indemnizaciones por más de 200.000 euros. 

Víctima de atropello: "Solo pensé en poner las manos en el capó y saltar"