jueves. 28.03.2024

Las comunidades abogan para relajar el uso de mascarillas en interiores por respetar el criterio de los expertos de la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta, que consideran que no debería retirarse hasta después de Semana Santa y no en todos los espacios ni para todas las personas.

Así lo han expuesto varias de ellas en vísperas de que se reúna en Toledo el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que, según avanzó la semana pasada el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, podrían abordar "lo que va a ser una nueva reglamentación en torno a la mascarilla", aunque este punto no figura expresamente en el orden del día.

De hecho, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha confirmado este martes que el asunto está ya sobre la mesa de debate y que "puede ser" que la próxima semana se decida eliminar el uso generalizado de mascarillas en interiores.

A diferencia de otras restricciones contra la covid, su uso está regulado por real decreto, si bien la semana pasada, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez garantizó que retiraría su obligatoriedad "al segundo siguiente" de que lo aconsejen los técnicos.

Desde el Ministerio de Sanidad, la ministra Carolina Darias se ha limitado a reiterar que "vamos a ir paso a paso, tomando medidas desde la prudencia, desde la progresividad y desde la gradualidad" y que la medida se aprobará "cuando las personas expertas que nos asesoran también lo propongan".

Estos expertos de la ponencia llevan semanas trabajando en una propuesta que debe ser revisada después en la Comisión de Salud Pública -que se reúne esta tarde- sobre el uso del cubrebocas; en ella argumentan que las modificaciones sobre la estrategia de vigilancia y control de la covid "deben realizarse de manera progresiva".

Con lo que, "consecuentemente, cualquier cambio en las normas de uso de mascarillas entre en vigor después de Semana Santa de 2022", reza el documento, en el que plantea una retirada progresiva, dependiendo de los ámbitos y el perfil de las personas.

Así, creen que deben seguir siendo obligatorias para trabajadores y visitantes de centros asistenciales y sociosanitarios -especialmente, residencias de mayores- y medios de transporte. Por el contrario, justifican que los alumnos ya no la utilicen "en el ámbito escolar".

También lanzan una serie de uso recomendados, entre ellas que las personas vulnerables se la pongan "en cualquier situación en la que tenga contacto prolongado con personas a menos de 1,5 metros, y en el trabajo, cuando no se pueda mantener esa separación y no haya una ventilación adecuada.

La mayor parte de las comunidades se han pronunciado a favor de respetar el criterio de los expertos, si bien no todas coinciden en el momento.

El Gobierno de Navarra considera que el "momento ideal" para que las mascarillas dejen de ser obligatorias en interiores es después de la Semana Santa, según ha dicho la consejera de Salud, Santos Induráin.

Tampoco el Gobierno Vasco es partidario de adelantar esta medida antes de la Semana Santa, ha aclarado el portavoz del Ejecutivo autonómico, Bingen Zupiria.

La consellera valenciana de Sanidad, Ana Barceló, ha señalado que estará a lo que digan los expertos y el documento de la ponencia de alertas del Ministerio de Sanidad.

De la misma opinión se mostró ayer Murcia: "La ponencia de alertas a nivel nacional se ha pronunciado y ha dicho que no está de acuerdo en que se quite, por lo menos, hasta que no pase la Semana Santa. Esa ha sido la propuesta", desveló el consejero de Salud de la Región de Murcia, Juan José Pedreño, quien prefirió ser "prudentes", atenerse al criterio de los expertos y técnicos y que se adopte en todo el país.

Igualmente, Extremadura aplicará lo que determine la ponencia, reiteró el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, para quien no se debe correr "en exceso" porque la nueva fase de la covid, en la que se han eliminado los aislamientos d elos leves y asintomáticos, lleva aplicándose "poco tiempo".

Andalucía es partidaria de esperar "unos meses" porque habrá acontecimientos que generarán una "enorme concentración de personas" como la Semana Santa, la feria de Abril de Sevilla o las diversas romerías, indicó por su parte el presidente la Junta, Juanma Moreno.

Desde Aragón, fuentes de la consejería aseguran a Efe que esta comunidad apoyará el acuerdo del Consejo Interterritorial y la decisión que se tome tras el debate técnico; en cualquier caso, apuesta por mantenerlas en entornos vulnerables y en transportes y en las personas con síntomas.

Baleares prefiere que los técnicos se pronuncien en la ponencia y que posteriormente se trate en la Comisión de Salud Pública, indican a Efe fuentes de la Conselleria de Salut.

Galicia ya indicó la semana pasada que, antes de seguir tomando decisiones orientadas a la relajación de las medidas preventivas de la covid se debe esperar "al menos quince días" para conocer el efecto del fin de los aislamientos de las personas asintomáticas con la nueva estrategia covid que arrancó el pasado 28 de marzo.

Madrid pidió hace un mes el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en interiores salvo en hospitales, residencias y transportes; recientemente, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, insistió en que habrá que plantearse su uso en el futuro, teniendo en cuenta la situación epidemiológica en cada momento, la época y los perfiles.

Cataluña lleva semanas urgiendo a retirarlas en los colegios: el conseller de Salut, Josep Maria Argimon, "apretará" de nuevo al Ministerio de Sanidad en este Interterritorial para que sea antes de Semana Santa aunque no descarta aplicar esta medida en Cataluña sin el consenso del Gobierno central.

El momento para relajar la mascarilla en interiores divide a las comunidades