El Celta de Vigo inició este lunes el primer proyecto de la etapa de Antonio Mohamed, con un entrenamiento con diecisiete jugadores y casi dos horas de trabajo. En la sesión estaban, entre otros, los defensas Sergi Gómez y Jonny, a los que la dirección deportiva busca una salida antes de que la plantilla inicie la concentración en A Toxa (O Grove).
El entrenador argentino mantuvo una charla sobre el césped con todo el grupo y, posteriormente, trabajó con esos diecisiete futbolistas, ya que los otro siete que estaban en el campo de las instalaciones deportivas de A Madroa han acudido a la clínica del club para someterse a las habituales pruebas médicas: Juan Hernández, Kevin, Eckert, Pastrana, David Costas, Iván Villar, Brais Méndez y Borja Fernández.
El central mexicano Néstor Araujo, el centrocampista turco Okay Yokusku y el lateral izquierdo David Juncá son, por el momento, las únicas caras nuevas del Celta, al que también regresan el francés Claudio Beauvue, el danés Andrew Hjulsager, David Costas, Borja Fernández e Iván Villar tras finalizar sus cesiones. No se han presentado en el primer entrenamiento el danés Daniel Wass y el delantero Borja Iglesias, que están a un paso de cerrar sus fichajes por el Valencia y el Espanyol respectivamente, así como el serbio Nemanja Radoja, con permiso del club para incorporarse más tarde.
Las otras ausencias significativas fueron las de los mundialistas Iago Aspas, Pione Sisto y Maxi Gómez, que se incorporarán de manera progresiva a los entrenamientos del equipo. A las órdenes de Carlos Massa y Claudio Kenny, preparadores físicos del cuerpo técnico, la plantilla se sometió a una intensa jornada de trabajo físico que se alargó durante más de una hora y media. La plantilla, dividida en dos grupos, realizó ejercicios de fuerza e intensidad, todos ellos sin balón, algo que era habitual la pasada temporada con el cuerpo técnico de Juan Carlos Unzué.
