Los Riazor Blues han justificado, a través de un comunicado, su ausencia en el estadio de Riazor el pasado domingo en el encuentro de la Liga BBVA ante el Espanyol y han criticado la actuación de la Policía y también la del Deportivo, el equipo al que animan desde 1987. El grupo ultra señala que cuando pretendían acceder a Riazor, la Policía les permitió pasar una pancarta con el nombre del grupo pero no la que rezaba 'Jimmy Vive', en recuerdo del aficionado fallecido el 30 de noviembre en una reyerta en Madrid Río con radicales del Atlético de Madrid, lo que motivó que el grupo decidiera "abandonar la grada y salir del campo".
Los Riazor Blues exponen que el club es conocedor de las actuaciones que va a efectuar la Policía antes de los partidos porque previamente "pactan y hablan de lo que van a permitir pasar y lo que no". Además, explican que la pancarta en recuerdo de Francisco Javier Romero, Jimmy, "no implica una incitación a la violencia, el racismo, la xenofobia o la intolerancia", por lo que, en su opinión, no incumplen la "Ley del Deporte" ni las "circular número 20 de la LFP" y no hay "motivo alguno" que les impida introducirlas al campo.
"Los mandos policiales presentes en el estadio se extralimitaron en sus funciones, la Policía está para velar por el cumplimiento de la ley, no para funcionar de matones bajo el amparo de su cargo público y hacer cumplir normativas internaras de entes privados", sostiene el grupo ultra. Al Consejo de Administración del Deportivo le critican por su "silencio posterior a este suceso y no mostrar el desacuerdo con esta actuación". "No pueden prohibirnos honrar la memoria de nuestro amigo asesinado en el lugar que consideramos nuestra casa, donde la mayoría de nosotros le conocimos y donde compartimos muchos momentos juntos. Nuestro delito es recordarle y tenerle presente en nuestra memoria, nuestro delito es no olvidarlo, ni querer que se olvide y exigir justicia", sostienen.
Los Riazor Blues también lamentan que la directiva del Deportivo les "juzgara y condenara" públicamente "a las pocas horas de lo ocurrido en los aledaños del Calderón y sin información alguna contrastada". Además, recuerdan que ahora, "con el secreto de sumario abierto" de lo que sucedió en Madrid Río siguen "a la espera de que el Consejo de Administración en pleno salga a la palestra a pedir disculpas a todos los deportivistas que se vieron involucrados en ese suceso".
