jueves. 18.04.2024

Unos 250 economistas académicos críticos y otros científicos sociales han firmado un manifiesto en el que apuestan por "un cambio de rumbo" hacia una nueva economía "en paz con el planeta y que permita reducir las insoportables desigualdades del modelo actual", en respuesta a la emergencia sanitaria.

 

El manifiesto, firmado en su mayoría por profesores de economía de distintas universidades españolas, apuesta por un mundo en el que "la sanidad y los servicios sociales públicos sean una prioridad" y donde las políticas se orienten a garantizar "una buena calidad de cuidados a lo largo de toda la vida".

 

Según el manifiesto, la pandemia ha mostrado algunos de los "aspectos negativos" de la globalización, así como la "debilidad de la Unión Europea", que "ni siquiera ante una crisis de este tipo ha actuado de forma conjunta ni para contener la epidemia ni para adoptar suficientes medidas políticas, económicas y sociales".

 

Los firmantes del texto temen que se utilicen recetas para salir de la crisis sanitaria similares a las que se adoptaron tras la recesión de 2008, que "justifiquen políticas de recortes que ahora se han mostrado criminales, contraproducentes e inútiles".

 

En su lugar, optan por "reconsiderar" el papel del Banco Central Europeo mediante mecanismos de mutualización de deuda pública, creando directamente dinero que vaya a los gobiernos y a la ciudadanía o con alternativas que eviten políticas de ajuste.

 

"La crisis ha de servir para repensar qué es lo importante para las vidas de las personas", afirma el manifiesto, que añade que los derechos laborales y sociales "han de pasar a primer plano", así como la política fiscal progresiva, entre otras medidas.

 

Los académicos concluyen con un llamamiento a "no repetir los errores de la última crisis" y a orientar la salida de esta nueva recesión provocada por la pandemia de coronavirus a "sentar las bases de una sociedad más justa, igualitaria y sostenible".

Académicos ven necesario un "cambio de rumbo" hacia una nueva economía social