Galicia pierde hoy algo más que una fábrica. La histórica marca de cerámica Sargadelos ha anunciado este miércoles el cese inmediato de su actividad, dejando en el aire el futuro de unos 200 trabajadores y marcando un punto de inflexión para el patrimonio industrial y cultural de la comunidad.
La decisión, comunicada personalmente por el propietario y administrador único Segismundo García durante una asamblea en la planta de Cervo (A Mariña), ha causado estupor y desconcierto entre la plantilla, no solo por su repentina ejecución, sino porque se produce en un momento de estabilidad económica para la firma.
🏭 De la expansión al cierre en cuestión de semanas
El anuncio llega apenas semanas después de que el grupo celebrara su expansión nacional e internacional, consolidando su presencia en nuevos mercados. Pero el mensaje de García fue contundente: "estoy cansado de las trabas burocráticas", en referencia a la multa de 5.000 euros recibida recientemente por parte de la Inspección de Trabajo, que detectó 36 deficiencias en las instalaciones.
La fábrica de Sargadelos, además, cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), lo que implica procedimientos largos y complejos para cualquier tipo de reforma. Según la empresa, esos plazos de autorización pueden demorarse entre seis meses y un año. Un argumento que el propietario ha esgrimido para justificar el cierre como una medida "de protección para la salud de los trabajadores".
💬 “Merecemos un descanso… también de sus innumerables normativas”
En el comunicado enviado a la Inspección de Trabajo, el administrador lanza un mensaje cargado de ironía:
“Intentamos hacerlo lo mejor que sabíamos. Nos esforzamos muchísimo. Pero también merecemos un descanso, sobre todo de sus innumerables normativas, ocurrencias y fatuo envaramiento”.
El tono del mensaje, lejos de ser técnico o empresarial, refleja un profundo desencanto personal por parte del empresario, que logró reflotar la marca tras las crisis vividas hace más de una década.
🏺 Una pérdida que va más allá del empleo
El impacto de este cierre no se limita a lo económico. Sargadelos es historia viva de Galicia, una firma creada por Isaac Díaz Pardo y Luis Seoane que supo conectar la tradición artesanal con la innovación estética, convirtiéndose en una referencia internacional del diseño gallego.
Su sede en Cervo, visitada por cientos de personas cada año, es un lugar de peregrinación cultural. El cierre de Sargadelos supone también una pérdida emocional para Galicia, para su industria creativa y para toda una generación que creció identificando su cerámica con identidad, memoria y arte.