domingo. 01.10.2023

Lo primero que debemos tener claro es el capital que tengamos disponible y queramos invertir, y valorar el riesgo de hacerlo entre un fondo fijo que nos dé un interés constante o la inversión bursátil.

 

Si optamos por esta segunda opción igualmente es conveniente minimizar riesgos y para ello muchas veces lo más importante es informarse bien sobre los valores de las acciones de diferentes empresas. Hay canales como prensa especializada, televisión, o portales web que permiten, por ejemplo, analizar la cuota de mercado de Renault, una empresa cotizada, y estudiar su posición bursátil por países.

 

Normalmente a la hora de realizar una inversión hay que encontrar una empresa con un crecimiento sostenido, por lo que tenemos que analizar concienzudamente sus últimos dos ejercicios, así como previsiones de expansión o inversiones en otros países,etc. Se debe analizar tanbién qué tipo de empresa es, y si tiene ventas estacionalizadas que puedan distorsionar un ejercicio o trimestre.

 

En cuanto a la rentabilidad de las inversiones, los expertos hablan de cuatro datos fundamentales como analizar la deuda, rentabilidad por dividendo ( que esté situada entre el 5 y el 12%), que el valor de los activos (en libros) de la empresa sea mayor que su precio de compra, o mirar si están infravaloradas y en qué países el negocio de la empresa sea mayor.

 

Por último, y aunque parezca obvio no hay que dejar de lado la situación económica global, previendo en la medida de lo posible cambios o decisiones políticas que pueden influir en el mercado global o en la posición de sectores económicos, y que podrían hacer girar 180 grados una inversión que a priori y con el análisis anterior parezcan muy interesantes. A tener en cuenta, por ejemplo, las decisiones del próximo presidente de EEUU proteccionistas sobre las industrias o las políticas europeas sobre medio ambiente. 

¿Cómo elegir las acciones de valores más rentables?