El Parlamento gallego ha rechazado este mediodía, por el voto en contra del PP, la pretensión de los socialistas de que la Xunta demandase al Gobierno central que reconsiderase la aplicación del tipo general del IVA del 21 por ciento a las peluquerías, de forma que se volviese al tipo reducido del 10.
La propuesta partió del socialista Juan Carlos González Santín, quien lamentó el "castigo especial" que a su juicio ha asestado el PP a estos establecimientos al subirles el impuesto, que supone un incremento del 160 por ciento de la carga impositiva del sector. Igualmente, calificó de incoherencia que el PP votase en contra de una medida que precisamente reclamaba este grupo presentada en 2005 en el Congreso.
La medida, dijo, lejos de incrementar la recaudación por el IVA, está causando el cierre de un treinta por ciento de negocios y el despido de trabajadores, mientras también consideró Santín que causa competencia desleal, al obligar a profesionales a trabajar de forma no legal. Para argumentar su voto en contra, la popular Herminia Pouso se remontó a la época en que el PSOE no reconocía la crisis e hizo un relatorio de las medidas, algunas impopulares, que el PP ha tenido que poner en marcha -a su juicio- para resolver una coyuntura muy difícil.
Pouso dijo que a su grupo le preocupan las peluquerías tanto como el resto de sectores, y destacó que dentro de la reforma tributaria que prepara el Gobierno se estudiarán "al detalle" medidas de interés general que permitan más recursos y garanticen el estado del bienestar, al tiempo que destacó que se está trabando en una bajada de impuestos.
Consuelo Martínez, de AGE, y Francisco Jorquera, del BNG, salieron en defensa de la iniciativa socialista. La primera insistió en que se trata de un trabajo "muy feminizado, con salarios de miseria", al que el PP "da la puntilla" con la subida del IVA. Jorquera también señaló que se trata de un problema "serio" que ya ha interesado el BNG en el Congreso y manifestó que el presidente Rajoy incumplió su promesa de diferenciar el tratamiento fiscal de las pequeñas peluquerías de las grandes cadenas.
