El grupo Popular en el Parlamento apoya en solitario una reforma legislativa que trata de abaratar costes a las empresas eólicas y que justifica para que Galicia vuelva a liderar el sector, un cambio al que se oponen AGE y el BNG, mientras el PSdeG ha anunciado que se abstendrá. El pleno del Parlamento, que aprobó esta mañana con los votos del PP la tramitación de este texto por lectura única, dará este mediodía el visto bueno a la modificación de la ley eólica de 2009 en dos apartados.
De un lado, la reforma legislativa trata de abaratar los costes de los parques, puesto que los avales que deben depositar, en lugar de en el momento de la concesión, se formalizarán en el momento de su construcción lo que, según cálculos de la Xunta, posibilitará un ahorro de unos 24.000 euros anuales en un parque que tenga 25 megawatios. Además, la reforma posibilitará que los titulares de los parques autorizados antes de la entrada en vigor de la ley podrán solicitar la devolución de los avales siempre que no hayan comenzado la construcción.
El conselleiro de Industria, Francisco Conde, destacó ante el pleno que el proyecto es "sencillo en su contenido, pero pieza clave" en el impulso de la Xunta al sector eólico. El titular de Economía indicó que la reforma permite facilitar la adecuación de los proyectos al nuevo escenario para conseguir que Galicia recupere el liderazgo eólico.
Tanto esta reforma como su tramitación por lectura única recibieron los reproches de la oposición, especialmente de AGE y del BNG, mientras el PSdeG consideró que la iniciativa es mera publicidad o "maquillaje" de lo que consideró fracaso de la política eólica del Gobierno de Alberto Núñez Feijóo. El portavoz socialista, Abel Losada, lamentó la "estrategia propagandística" del Ejecutivo gallego y consideró que la iniciativa es un cambio puntual de trascendencia limitada.
Apuntó que los socialistas no quieren ser "cómplices de la dimensión teatral" de la iniciativa y consideró que la Xunta trata con ella de mantener la "sensación lampedusiana" que "se están haciendo cosas" cuando el plan eólico está "totalmente" paralizado. Por su parte, Antón Sánchez, de AGE, indicó que la Xunta únicamente pretende "salvaguardar los intereses de unos pocos", las grandes eléctricas propietarias de la mayoría de los parques, a través de un modelo de "monopolización del viento" e indicó que las medidas servirán únicamente para salvaguardar los intereses de las empresas, que podrán "huir adonde quieran" con sus avales.
Para el diputado de Alternativa, el propio concurso eólico es un "coto cerrado para los amigos" y se deniega autorizaciones a ciudadanos que quieren explotar energía eólica renunciando a las primas, lo que comparó con la reserva del derecho de admisión de las discotecas en las que solo entran los "guapos con zapatos y bolsos de marca", ironizó.
Carme Adán, del BNG, insistió en que la reforma revela el "fracaso" del Gobierno de Núñez Feijóo en materia eólica, un "modelo de colonización postmoderno" que supone la "expropiación" de los recursos naturales de Galicia en favor de las grandes empresas. "Quieren facilitarle los trámites y mejorar su financiación", apuntó Adán, pero "en ningún momento" el PP propone "una sola medida" para la mejora del empleo en Galicia, ni se reconoce el "parón eólico que ustedes mismos provocaron". Por su parte, el popular Pedro Arias defendió la aprobación por lectura única de este proyecto, ya que se trata de una modificación "puntual" que no afecta a lo sustancial de la norma.
