lunes. 17.02.2025

La crisis económica y financiera que atraviesa nuestro país ha endurecido las condiciones impuestas por los bancos para conceder financiación. Las cifras de morosidad, tampoco ayudan demasiado a que las entidades financieras abran de nuevo el grifo del crédito.

 

Ante este panorama, la gente, necesita alternativas financieras a las que pueda acceder con la mayor rapidez posible para salir al paso de sus necesidades puntuales de dinero.

 

Una dificultad de acceso a la financiación que ha hecho que proliferen en Internet empresas que ofrecen microcréditos urgentes, préstamos de baja cuantía a devolver en un corto período de tiempo, lo que se conoce como micro-préstamos.

 

En esta línea, la de la inmediatez “sin papeleos”, se inscriben un variado elenco de empresas en la red que tratan de dar respuesta a las necesidades de financiación más inmediatas.

 

Los micro-préstamos ‘online’ aparecieron en España a principios del 2010. Desde entonces el sector ha experimentado un crecimiento constante. La aparición de diferentes empresas en medios de comunicación ha disparado el crecimiento de todo el sector ya que se ha dado a conocer un producto financiero hasta ahora desconocido.

 

En cuanto a cifras, según estudios de Aemip, en el 2014 se concedieron más de 500.000 préstamos frente a 1,5 millones de solicitudes recibidas. Estiman que en el 2015 el número de préstamos concedidos se acercará al millón y supondrá cerca de 270 millones de euros de capital prestado.

 

La crisis económica es uno de los motores causantes del auge de los microcréditos pero también debemos resaltar que este crecimiento se debe a las facilidades de estos servicios para los usuarios. Una de las ventajas que ofrecen frente a los préstamos tradicionales es que su contratación se realiza a través de Internet, lo que hace que su aprobación o denegación sea casi inmediata.

 

Nos evitamos así, desplazamientos a los bancos… y el tiempo de espera para saber si nos lo aceptan o no. Algo a tener en cuenta cuando se necesita el dinero con urgencia.

 

Con un simple formulario se termina la gestión. Este es el espíritu del micro-préstamo, desde el móvil o desde un ordenador puedes pedir una inyección puntual de dinero, con la rapidez de enviar un SMS o indicarlo en la web. Esta es la razón que lleva a todo tipo de perfiles de clientes a acudir a estos servicios.

 

La solicitud de dinero a través de estas empresas es muy fácil. Tan sólo hay que entrar en su página web, elegir la cantidad que se necesita pedir y el plazo de devolución, complementar un formulario con los datos básicos del cliente, entre ellos, un número de cuenta bancaria y esperar la respuesta.

 

El proceso de aprobación o denegación del mini préstamo es de aproximadamente 10 minutos, dependiendo del importe. En caso de que la solicitud sea aprobada, el dinero puede estar en la cuenta del cliente en apenas una hora. Existen multitud de situaciones en la vida en las que nos podemos ver obligados a utilizar estos sistemas de financiación rápida de pequeñas cantidades de dinero.

 

Son un recurso muy útil en momentos de necesidad en los que andamos escasos de liquidez y es necesario afrontar una compra o un gasto que no puede retrasarse, como los libros del colegio, las compras de Navidad, facturas de la luz o el gas, etc. En conclusión, los micro-préstamos son productos útiles para obtener dinero en una situación puntual de falta de liquidez.

 

Sin embargo, a pesar de necesitar ese crédito rápido, no es bueno actuar con prisas y no tomarse un tiempo para analizar y meditar cual es el préstamo que más nos conviene. Estos son algunos consejos que deberías tener en cuenta si no tienes otra opción y necesitas contratar un préstamo rápido.

La opción de los préstamos rápidos