La conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, recordó hoy que la Xunta de Galicia destinará este año 25 millones de euros para colaborar con la industria de transformación agraria, ayudas concedidas para la modernización de instalaciones y procesos con el objetivo final de que acaben revirtiendo en la producción primaria. La titular de Medio Rural realizó estas declaraciones durante la visita que realizó esta mañana a las instalaciones de la fábrica de Novafrigsa, en Lugo, en compañía del consejero delegado del grupo Coren, Manuel Gómez Franqueira..
"La Xunta de Galicia, durante este año, realizó un importante esfuerzo en lo que se refiere a las industrias de transformación, de cara a la modernización", dijo la conselleira, para que "nuestro producto tenga más valor y eso repercuta directamente en el medio rural". Ángeles Vázquez recordó que el Gobierno gallego destinará "25 millones de euros" a ayudas para "las industrias de transformación agraria" durante este año, de las cuales "más de 10 millones de euros" vendrán para la provincia de Lugo "porque presentó buenos proyectos" y porque el "rural está muy presente" en su economía.
La conselleira precisó que en esta provincia se presentaron a la línea de ayudas habilitada por la Xunta de Galicia un total de 26 proyectos, entre ellos el que formalizó Novafrigsa. Por su parte, Gómez Franqueira recordó que hace ya veinte años que Coren se incorporó al complejo de Novafrigsa y, a día de hoy, en todo el proceso productivo "más de 850 familias" están vinculadas en la provincia de Lugo al grupo. "En esta planta los tiempos son diferentes a como eran antes.
La internacionalización que estamos llevando a cabo, en este momento estamos empezando a enviar productos a Indonesia", implica nuevas obligaciones, explicó Gómez Franqueira, "porque desde el momento que sales del mercado local, las exigencias son muy distintas". Por ello, recordó que "el proceso de transformación tiene que ser dinámico" para "ser competitivos a nivel global", lo que obliga a poner en funcionamiento "unas plataformas de logística más rápidas para darles salida a los productos" y unas salas de transformación "muy importantes".
"Del canal se pasó al despiece, del despiece al deshuese y del deshuese a las piezas y productos ya preparados para los restaurantes y el consumidor final", abundó, a lo que se suman las exigencias particulares de cada país, "porque un mercado como Japón" demanda "una infiltración diferente de la que puede pedir Alemania, Corea o China, donde vamos a empezar"
. En adaptarse a esas exigencias y explorar esos "nichos de mercado" está el "dinamismo" de toda la industria agroalimentaria gallega, añadió Gómez Franqueira, quien opina que "todos" deben "ir en la misma dirección". Desde su punto de vista, la salida de los productos agroalimentarios gallegos está "en la exportación", porque "aquí, con dos millones y medio de habitantes, con lo que producimos y con lo transformamos" es "cada vez más difícil" y "los precios son cada vez menos rentables". "Saliendo fuera, vamos buscando nichos de mercados", concluyó.