Pescanova ha logrado un beneficio neto atribuido a la sociedad dominante de 560,7 millones de euros en los nueve primeros meses de su ejercicio - del 1 de diciembre de 2014 al 31 de agosto de 2015-, lo que significa un descenso del 68,4 % frente a unas ganancias de 1.786 millones registradas un año antes. Según ha comunicado hoy la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la facturación del grupo se incrementó un 9,2 % al cierre de su tercer trimestre, con una cifra de negocio de 771 millones de euros.
La compañía pesquera, en proceso de modificación hacia la Nueva Pescanova, ha explicado que estos resultados los compara con los meses de enero a septiembre de 2014, y no incluye el mes de diciembre, cuando genera el volumen de ventas más significativo. El Ebitda de la compañía -resultado bruto de explotación- registró una reducción del 31 %, pasando de 54 millones de euros en los nuevos primeros meses del pasado ejercicio, hasta 37 millones de euros en igual periodo del año en curso. "Esta reducción tiene su origen en el impacto negativo en el negocio del cambio del euro frente al dólar", ha explicado.
La deuda neta de la compañía a 31 de agosto ascendía a 671 millones de euros, que en términos nominales se traduce en 978 millones de euros. Este trimestre será el último que Pescanova informe como grupo consolidado, ya que al cierre del ejercicio 2015 se habrán ejecutado las fusiones y escisiones previstas en la pasada junta de accionistas celebrada el 29 de septiembre, según la nota de la CNMV.
Entre las modificaciones aprobadas en la citada junta destaca que los acreedores de Pescanova -los siete bancos:Sabadell, Popular, Abanca, Bankia, BBVA, CaixaBank y UBI Banca- tomarán una participación del 80 % de Nueva Pescanova, mientras que la antigua Pescanova (los actuales accionistas) se quedarán con el 20 % restante.