El juzgado de lo Mercantil número 2 de A Coruña ha acogido hoy la vista oral del juicio, que ha quedado visto para sentencia, contra la compañía telefónica Orange por un presunto cobro irregular de períodos completos de facturación a sus clientes incluso cuanto estos de daban de baja antes de completarlo. La vista ha tenido lugar después de la admisión a trámite, en el pasado mes de junio, de una demanda colectiva presentada por la Fiscalía Provincial de A Coruña contra la compañía por supuestas "prácticas abusivas" en la facturación a sus clientes.
Según ha denunciado el Ministerio Público en el juicio de esta mañana, la empresa de telefonía emitió de forma reiterada facturas en las que se reclamaba la cuota completa de un determinado período a sus clientes, a pesar de que estos se habían dado de baja del servicio antes de que finalizase. El fiscal ha reiterado hoy los argumentos esgrimidos durante la vista de medidas cautelares celebrada el pasado mes de julio, en la que se decretó que la empresa debería abandonar esta práctica.
Así pues, ha insistido en la "ilegalidad" de este tipo de facturación y ha solicitado al juez que, en caso de que emita una sentencia estimatoria de la demanda, obligue a Orange a dar publicidad de la misma con un anuncio en prensa de tirada nacional, así como a comunicárselo al resto de operadores de telefonía. Por su parte, la defensa de la compañía ha vuelto a argumentar que este tipo de cobros del período de facturación completo no son ilegales, puesto que no existe un marco regulatorio claro al respecto y que, en cualquier caso, ya no se hacen.
Orange ha defendido que su facturación no se hace de forma lineal, con una determinada cuota por día, sino que el cliente disfruta del paquete entero de servicios desde el primer momento, pudiendo incluso llegar a agotar la capacidad de su tarifa mucho antes del período establecido para la misma, razón por la cual se adoptó el cobro hoy juzgado. Del mismo modo, la compañía ha lamentado el daño que le está produciendo la repercusión mediática del proceso, que le está causando "descrédito comercial", motivo que ha esgrimido para oponerse también al anuncio en prensa reclamado por la Fiscalía.