viernes. 29.03.2024

El gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa, ha reconocido hoy que la política de personal de Povisa es "errática", pero también que, desde que existe concierto, hay una mayor estabilidad laboral en el centro sanitario privado, que presta servicio en el área de Vigo. Fernández-Campa respondió hoy en el Parlamento a una pregunta de la diputada del BNG Montse Prado, quien resaltó que la renovación del concierto por ocho años y un importe de más de 600 millones de euros más IVA "condiciona el diseño del conjunto del área sanitaria".

 

También denunció que se renovó por el mismo importe que los anteriores, cuando los presupuestos sanitarios de Galicia se redujeron en un 12 por ciento desde 2009 y el centro vigués "triplica" las listas de espera media gallega. Denunció asimismo la "opacidad" y "oscurantismo" con que se procedió a esta renovación e hizo hincapié en la pérdida de condiciones laborales y despidos de trabajadores, incluso con incumplimiento de sentencias judiciales, con la justificación de que en este año entrará en pérdidas, cuando el año pasado presentó 11 millones de euros de beneficio y el concierto garantiza la estabilidad de la empresa. En la réplica, Prado, que subrayó que el de Povisa es el mayor concierto sanitario de España con una empresa privada, acusó al representante del Sergas de avalar la política laboral. Por su parte, Fernández Campa negó que avalara la política laboral de Povisa y dijo que, personalmente, la consideraba errática, por la presentación de un ERE que después retiró y anunció despidos.

 

En su respuesta, el responsable del Sergas dijo que no se puede defender una cosa y la contraria, en el sentido de rechazar el concierto y pretender que se mantengan los puestos de trabajo, un extremo que afirmó que lo habían declarado públicamente miembros del propio comité de empresa. También recordó que en el concierto formalizado en septiembre de 2014 se recoge por primera vez que los ciudadanos pueden elegir acudir a este centro o no y que el propio acuerdo recoge, además de un porcentaje de complemento por la calidad asistencial, penalidades por incumplimiento en asuntos como la disponibilidad de medios materiales y humanos para prestar la atención sanitaria establecida.

 

En cuanto al ámbito laboral, resaltó que con la firma del concierto se pasaron de eventuales a fijos 184 contratos e insistió en que en 2006, cuando se firma el acuerdo básico con el centro, el 73,1 por ciento de la plantilla era estable (1.307 trabajadores) y hoy es el 79,7 por ciento (1.470). El gerente sanitario subrayó que, en cuanto a personal facultativo y de enfermería, se pasó de 171 a 261 en el primer caso, con un incremento del 53 por ciento; y de 291 a 375 en el segundo, que supuso un aumento del 29 por ciento, por lo que consideró que la estabilidad y las condiciones de empleo se están cumpliendo. También rechazó las acusaciones de opacidad y falta de transparencia en el proceso de licitación, pues los pliegos fueron publicados en la página web del Sergas y el contrato se hizo público antes de 48 días desde su formalización, como indica la normativa y, por demanda del Parlamento, se publicó también en la página citada el 1 de diciembre de 2014.

El Sergas reconoce la política "errática" de Povisa, pero ve más estabilidad