Las centrales sindicales que negocian el convenio colectivo del sector metalúrgico en la provincia de Pontevedra barajan la posibilidad de convocar una huelga si en la patronal no se produce una reacción tras las movilizaciones del próximo día 15. Tras retomar hoy las negociaciones, los sindicatos se han mostrado disconformes con las propuestas de la parte empresarial, que plantea una subida salarial del 0,5% este año a partir de la firma del convenio y del 0,75% para 2016, y la reducción del plus de eventualidad y su cobro a la finalización de contrato.
El secretario general de la patronal Asime, Enrique Mallón, ha destacado que se han quedado atrás "numerosas" propuestas empresariales y ha recordado que la situación de "atonía" del sector, donde la recuperación es "muy leve".
Mallón ha hecho hincapié en que el sector "no se puede permitir" que siga sin haber un acercamiento de posturas entre las partes cuando ya se han celebrado quince reuniones. Una visión que difiere con la de los representantes sindicales en la negociación, que han afirmado que la patronal los está casi "obligando" a ir a la huelga, según palabras de Belén Valiño, de UGT. Ramón Sarmiento, de CCOO, ha considerado inasumible el cambio del complemento de eventualidad planteado por la patronal, cuya última propuesta no casa con su deseo de cerrar pronto el proceso de negociación.
Los sindicatos no esperan que haya un cambio sustancial en los planteamientos de la patronal en la próxima reunión, el 13 de octubre, por lo que se mantienen las movilizaciones dos días más tarde en Vilagarcía (calle Castelao), Pontevedra (plaza de la Peregrina) y Vigo, en los locales comarcales de CIG, UGT y CCOO. Xulio Fernández Alonso, de la CIG, ha recalcado que la patronal, con su actitud, parece que les "piden" que se movilicen.
Ha hablado de "amenazas" y de alargar las reuniones a propósito, sin atender a las propuestas de los sindicatos, lo que ha interpretado como una invitación a la "pelea". Las negociaciones por el convenio del metal en la provincia de Pontevedra, que comenzaron en enero, se han retomado hoy después de exigirlo la pasada semana un grupo de trabajadores que se concentraron ante la sede Asime en Vigo.
