sábado. 02.11.2024

La ministra de Educación, Pilar Alegría, ha manifestado su respeto a los padres que deciden y creen que es mejor la educación segregada por sexos y ha asegurado que, aunque tienen libertad para exigirla, no disponen del derecho a que se financie con dinero público.

Así lo ha dicho Alegría este martes en la sesión de control al Gobierno del Senado, al ser preguntada por su opinión sobre la decisión del Ejecutivo Foral de Navarra de retirar los conciertos educativos de la etapa de Bachillerato a los centros que imparten educación diferenciada, pregunta formulada por la senadora del PP por Navarra, Amelia Salanueva Murguialday, quien ha acusado al Gobierno de actuar "por exigencia" de "un grupo político moralmente cuestionable", como EH-Bildu.

A juicio de la senadora popular, la decisión del Gobierno de Navarra es "un ataque irresponsable a la libertad de enseñanza" que supondrá "un daño irreparable" a los alumnos y que no responde a una política de coeducación sino a "sectarismo puro y duro".

La pasada semana el departamento de Educación del Gobierno de Navarra remitió a los centros educativos de Irabia-Izaga y Miravalles-El Redín la notificación de la extinción de los conciertos educativos de la etapa de Bachillerato, por mantener separado por sexos al alumnado de esta etapa.

El Gobierno Foral alegó que ambos centros han incumplido la disposición adicional 25 ª de la Lomloe, al mantener separado al alumnado de bachillerato por su género, con lo que no cumplen los requisitos para poder concertar.

Alegría ha manifestado que la decisión de la Comunidad Foral está adoptada en base a una legislación vigente que los centros educativos tienen que cumplir y ha acusado al PP de "estar muy abonado al refrán de consejos vendo, que para mí no tengo".

"Nos ha llamado sectarios", ha espetado la responsable de Educación a Salanueva, antes de pedirle que aplique el mismo término al presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, por haber anunciado que anula la financiación pública a los colegios que segregan por sexo. 

Alegría rechaza que la educación segregada se financie con dinero público