viernes. 29.03.2024

Paula Fernández

Vivir en el medio rural puede suponer un impacto extra en el día a día de los cuidadores de un enfermo neurodegenerativo. Estas familias son el foco de un proyecto ibérico que se ha propuesto mejorar su calidad de vida y su acceso a los recursos sociosanitarios.

Son familias de la zona transfronteriza de la española Castilla y León y del Norte y Centro de Portugal, donde el envejecimiento y la despoblación también tienen consecuencias sobre los cuidados de las personas con enfermedades como el alzheimer, el parkinson y la esclerosis múltiple.

Bajo la coordinación de la Universidad de Salamanca, socios españoles y portugueses se han unido en el proyecto Neuroqualyfam para estudiar las necesidades de estas familias y facilitar su acceso a servicios que mejoren su calidad de vida, incluso compartiendo los recursos a un lado y otro de la frontera.

"Se trata de evaluar en qué medida las necesidades son cubiertas por los servicios disponibles", relata a Efe la coordinadora del proyecto,

Begoña Orgaz, de la Universidad de Salamanca, que señala que esta zona "tiene unas características especiales" comunes a ambos lados de la Raya: es "eminentemente rural y con municipios pequeños y dispersos".

La iniciativa arrancó en 2019 con un presupuesto de casi 560.000 euros, el 75 % financiado por el Fondo de Desarrollo Regional FEDER a través del Programa de Cooperación Transfronteriza Interreg España-Portugal (POCTEP).

ESTUDIAR LAS NECESIDADES Y LOS SERVICIOS

El primer paso ha sido estudiar la situación. Por un lado, la incidencia de las enfermedades neurodegenerativas en la región, y por otro, identificar qué necesidades tienen los cuidadores.

Para ello se ha creado un cuestionario que han respondido 300 familias de la zona española, que avanzará también en el lado portugués, donde el proyecto se ha retrasado por las restricciones de la pandemia.

Los resultados de las familias españolas ya están disponibles: "Sobre todo tienen necesidades de más información, de servicios, de ocio y tiempo libre y de integración comunitaria", explica la coordinadora.

También se ha puesto en marcha un mapeo de los servicios sanitarios, sociales y del tercer sector que están disponibles en esta región transfronteriza y que pueden dar apoyo a las familias.

El análisis de toda esta información desembocará en una plataforma TIC donde los cuidadores podrán tener un diagnóstico sobre su calidad de vida familiar e información de los servicios disponibles para mejorarla.

INTEGRACIÓN TRANSFRONTERIZA

El diseño final de esta plataforma se abordará en una reunión prevista para el mes de mayo, pero los socios se plantean incluso apostar por una integración total de los servicios a ambos lados de la frontera.

"Hay zonas de España para las que igual el servicio más cercano está en Portugal", refiere Orgaz, que explica que uno de los problemas que más refieren las familias es que los recursos que necesitan no existen en su municipio o tienen dificultades para desplazarse hasta ellos.

Por ello, la plataforma podría incluir los servicios sociosanitarios de ambos países y, a través de un sistema de geolocalización, determinar cuál es el más próximo para una familia, aunque esté al otro lado de la Raya.

"Puede suponer una economía de tiempo y de costes, fusionar servicios de las dos zonas y que funcionen de forma integrada", defiende la coordinadora, que concluye que en estas regiones la cooperación transfronteriza es "fundamental".

Además de la Universidad de Salamanca, son socios de Neuroqualyfam la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León (Sacyl), la Diputación de Salamanca y el cluster SIVI (Soluciones Innovadoras para la Vida Independiente), por parte española, y los Institutos Politécnicos de Braganza y Guarda y la asociación ADM Estrela, por parte portuguesa. EFE

Cuidar a quien cuida de un enfermo en el medio rural