jueves. 28.03.2024

El Gobierno de España, a través de las delegaciones de Galicia y Castilla y León, ha homenajeado a Maximiliano Plaza Bretón, natural de Babilafuente (Salamanca), por su "heroísmo y solidaridad" tras fallecer después de extinguir un incendio entre Galicia y Portugal en verano de 2020.

El delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo, que junto a José Miñones, delegado en Galicia, han presidido el acto en la base aérea de Matacán (Salamanca), ha señalado que Maxi -como era conocido el piloto español- y Jorge Manuel Santana Jardim, el segundo fallecido en el accidente de Lobios (Ourense), murieron "por el bien común, sin importarles si el bosque era español o portugués, si el avión era de una u otra nacionalidad".

"No existían las fronteras, ellos trabajaban por salvar un ecosistema común, el planeta, y por salvar las vidas de seres humanos a los que ese incendio podía afectar. El ejemplo de Maxi y de su compañero nos sirve como bandera, en unos tiempos en los que a veces la solidaridad y la entrega no son comprendidas", ha agregado Izquierdo.

Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia ha destacado que, "a pesar del esfuerzo, el compromiso y la solidaridad de muchos, en Galicia los incendios cuestan montes y parques, cosechas perdidas, casas destruidas y en ocasiones los incendios cuestan vidas".

Para los dos delegados del Gobierno este acto ha sido un homenaje, una forma de "saldar una deuda con Maxi y con su familia", por lo que se le ha concedido la Medalla al Mérito de Protección Civil en su categoría de oro con distintivo rojo, porque con ella se "distingue el heroísmo y la solidaridad en su máxima expresión", ha explicado Miñones.

"Esta medalla es motivo de orgullo y un homenaje a todos los que luchan contra el fuego, a todos los que con su compromiso y solidaridad hacen una sociedad y un país mejor", ha añadido el delegado del Gobierno en Galicia.

En representación de la familia, Verónica Pérez, y el padre de Maxi, Marcelino Plaza, han evocado las virtudes personales de este joven piloto de Babilafuente (Salamanca), que murió tres meses después del accidente de Lobios como consecuencia de las heridas sufridas.

Plaza ha asegurado, entre la emoción del homenaje a su hijo, que era "un buen padre, buen hijo, buen hermano y buen amigo", algo de lo que "toda la gente que lo conocía puede dar fe" y ha recordado que, "cuando tenía algún rato libre, ayudaba a sus hermanos y a su madre y a mí, nos echaba una mano en la panadería".

jsc/erbq/am

El Gobierno reconoce el heroísmo del piloto que murió tras un fuego en Galicia