Un suceso sorprendente ha llamado la atención en Tenerife. Un médico de la localidad decidió dejar su lujoso chalet en herencia a los vecinos de su pueblo, generando asombro y gratitud en la comunidad. Este peculiar gesto ocurrió tras el fallecimiento del médico ginecólogo Eduardo Pinto en enero. Sus herederos descubrieron que parte de su patrimonio debía ser destinado a los habitantes de su pueblo natal, lo cual incluía su impresionante chalet.
El Ayuntamiento de El Sauzal ha recibido el inmueble donado por Don Eduardo Pinto de Carvalho y Baptista. Tras su reciente fallecimiento, el reconocido ginecólogo afincado en el Municipio, legó su residencia habitual, situado en la zona de El Calvario, al Consistorio.
La parcela donada, valorada inicialmente en más de un millón de euros, cuenta con cinco habitaciones, bodega, ático, barbacoa, piscina cubierta, amplios jardines, garajes y porches. Además, el legado incluye todo el contenido de la vivienda, como cuadros, muebles, decoración y cuatro vehículos. La propiedad, ubicada en un lugar privilegiado al borde de un acantilado con vistas al mar.
Siguiendo las instrucciones del médico, el ayuntamiento ha decidido convertir el chalet en un hogar para personas mayores, cumpliendo así con un fin social y cultural. Además, se está trabajando en colaboración con la Universidad de La Laguna para catalogar las obras de arte y exhibirlas para el disfrute de todos los vecinos.
Pinto de Carvalho también ha donado al Ayuntamiento de El Sauzal todos los cuadros y bienes que tenía en su consulta ginecológica de La Laguna. Además, también donó terrenos y otros bienes al Consistorio de Santa Cruz de Tenerife y a la Casa de Acogida Madre del Redentor.
Este generoso gesto ha despertado admiración y gratitud en la comunidad, destacando el espíritu altruista del médico y su deseo de contribuir al bienestar de su pueblo incluso después de su partida. Una historia que demuestra cómo un acto de generosidad puede dejar una huella duradera en la vida de una comunidad.