El diputado de Alternativa Galega de Esquerda (AGE) Antón Sánchez ha demandado hoy al presidente de la Xunta "el cese inmediato" de la conselleira de Trabajo, Beatriz Mato, "sumergida en el corazón del grave caso de corrupción que responde al nombre de operación Zeta". Bajo esta denominación, la justicia investiga un presunto fraude masivo de dinero público en cursos formativos que no se ejecutaron tras ingresar la subvención.
"Las grabaciones de conversaciones, los mensajes telefónicos, los correos electrónicos y otra documentación muestran la pertenencia de Gerardo Crespo -uno de los principales implicados- al PP y sus excelentes relaciones con el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira. O con la conselleira Mato, que eran clave para conseguir contratos de la Administración autónoma", apunta Sánchez en un comunicado de AGE. El diputado de la coalición afirma que la operación Zeta es "una trama por la que empresas vinculadas al PP -sobre todo en A Coruña- recibían suculentos contratos públicos".
Por este motivo, Sánchez considera que el presidente gallego debe explicar por qué la Xunta investigó y denunció determinados cursos de formación "después de la incoación de las diligencias previas, cuando ya estaban en fase muy avanzada, con la intervención de teléfonos y cuentas de correo".
"Es decir -sostiene el diputado de AGE- la Xunta del PP sólo investigó a Crespo y compañía después de iniciarse el proceso penal". Para este grupo parlamentario, a la conselleira de Trabajo y Bienestar "no le queda otra que la dimisión" ya que "no actuó" y, al menos por omisión, incide Sánchez, "permitió que la trama corrupta se extendiese en el tiempo".
El diputado de AGE afirma que la conselleira también debe explicar sus relaciones con Gerardo Crespo y señala que el exdirector general de Trabajo Odilo Martiñá fue llamado a declarar "en calidad de imputado" por la policía judicial por su presunta relación con este caso y "se negó" a hacerlo.
AGE también solicita la dimisión de sus cargos en el tejido asociativo de A Coruña de Héctor Cañete, otro de los imputados en esta operación y demanda a Carlos Negreira que explique sus relaciones con esta persona y con Gerardo Crespo, "muy especialmente la financiación irregular del PP procedente de las donaciones de Gerardo Crespo que constan en el sumario". "La corrupción en el Partido Popular no es una cuestión de casos aislados, sino un problema estructural, irrigado habitualmente por la financiación ilícita", concluye Sánchez.
