La denominada jornada de participación, sin carácter vinculante, para que los catalanes se pronuncien sobre la independencia de Catalunya ha arrancado con «absoluta normalidad», según ha informado el Govern en un comunicado. Sobre las 09.00 horas se han abierto los centros de votación habilitados, con la ayuda de unos 40.000 voluntarios.
En un principio, los únicos incidentes registrados han ocurrido en dos sedes, que han amanecido con las puertas pegadas con silicona. Además, La directora del IES Pedraforca de L'Hospitalet de Llobregat se ha negado a entregar las llaves del centro, lo que ha obligado a cambiar el espacio de votación. A parte de eso, las colas han sido las protagonistas en los puntos de votación habilitado. Entidades y partidos soberanistas, bajo el amparo del Govern de la Generalitat, han convocado a los catalanes que lo deseen a pronunciarse sobre el futuro de Catalunya en el que denominan «proceso participativo», que está suspendido por el Tribunal Constitucional (TC) a petición del Gobierno.
La ejecución del 9N recae en 40.930 voluntarios -incluidos funcionarios y docentes- que se encargarán este domingo, en los locales puestos a disposición por ayuntamientos y Generalitat, entre ellos colegios e institutos, de organizar la votación, presidir las mesas y de ayudar en el recuento, que coordinará el gobierno catalán. Según la Generalitat, el proceso participativo cuenta con 1.317 locales de participación y 6.695 mesas en las que se instalan miles de urnas para la ocasión, si bien el gobierno catalán también ha dado la opción a los ciudadanos de descargar la papeleta a través de la web que informa sobre el desarrollo del 9N.
Aunque es un proceso abierto a diversas propuestas, se plantea a los ciudadanos que se pronuncien sobre la doble pregunta que acordaron el pasado diciembre CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP: «¿Quiere que Catalunya sea un Estado?» y, en caso afirmativo, «¿Quiere que sea un Estado independiente?».
También se ofrece a los ciudadanos la posibilidad de suscribir un escrito de denuncia de la actitud del Gobierno central ante el «derecho a decidir» de los catalanes que se trasladará a organismos internacionales. Mayores de 16 años con residencia acreditada en Catalunya podrán votar en los locales repartidos en todos los municipios catalanes salvo cinco, en los que no habrá punto de participación: Pontons (Barcelona), Arras, Bausen y Canejan (Lleida); y Horta de Sant Joan (Tarragona), aunque en este pueblo CiU financiará el coste de cuatro autobuses hasta Gandesa (Tarragona) para que los vecinos que así lo deseen puedan votar.