El brote de coronavirus generado en una fiesta de fin de curso de un centro educativo de Córdoba deja hasta el momento 36 personas infectadas, según las pruebas realizadas por los servicios de la Consejería de Salud y Familias.
La respuesta al llamamiento realizado por el consejero Jesús Aguirre y después por el alcalde, José María Bellido (PP), para que las personas que hubiesen estado en la fiesta fuesen a los servicios sanitarios para someterse a las pruebas PCR ha ocasionado grandes colas en el denominado AutoCOVID, ubicado en el centro de salud Carlos Castilla del Pino. Fuentes conocedoras del caso han dicho a Efe que por la mañana se detectaron veintiséis casos y que esta tarde han dado positivo otros cinco, que unidos al mismo número que ya se habían identificado a través del rastreo realizado por la Junta de Andalucía desde que se conoció el contagio suman los 36 positivos.
Las mismas fuentes valoran que la proyección del brote, con cuatrocientas personas directamente implicadas en la fiesta y con una semana de movimiento de los posibles vectores de contagio, ya que la celebración tuvo lugar entre la noche del viernes y la madrugada del sábado de la semana pasada, puede provocar un número destacado de casos y de personas que deberán guardar cuarentena.
El alcalde, en un bando que ha emitido este viernes, advierte de que las "personas consideradas contactos han de permanecer durante la cuarentena en su domicilio, preferentemente en una habitación individual, restringiendo al mínimo las salidas de la habitación". En el brote, del que alertó el propio centro educativo a los padres mediante una circular el positivo de un alumno, están implicados, junto a escolares de segundo de Bachillerato, profesores y padres que participaron en la fiesta con motivo del fin de la estancia en el centro de los matriculados en este curso.
