martes. 16.04.2024

Los grupos de acción local de pesca (GALP) de Galicia han lanzado la campaña 'Queda na casa, queda co noso mar', para visibilizar la labor de la gente del mar ante la situación provocada por el Covid-19.

 

La iniciativa, que podrá seguirse en redes sociales bajo el lema #QuedaCoNosoMar, acerca información de primera mano sobre la importancia que tiene el trabajo del sector, tanto a nivel económico y social.

 

Para eso, los GALP aportan diversas voces para reflejar las valoraciones y testigos procedentes de las distintas actividades del mar: pesca extractiva, acuicultura, marisqueo a pie o comercios. Entre esas voces destaca la del presidente de la Federación Galega de Confrarías, José Antonio Pérez, quien reconoce que “son días muy complicados” para el sector, del que viven directamente 22.000 personas en la comunidad autónoma.

 

Señala que desde la Federación trabajan para defender la importancia que el consumo de productos del mar tiene para la sociedad, así como las características particulares que existen entre las distintas actividades del mar, como pueden ser la pesca y el marisqueo.

 

Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores, Basilio Otero, asegura que desde el inicio del estado del alarma el sector del mar, tanto en Galicia como en el resto de España, redujo en gran medida su actividad, con parones de hasta el 70% de la flota en algunas autonomías.

 

Todo ello provocado por la necesidad de equipos de protección individuales (EPIs), la caída de la demanda doméstica y el cierre del canal de hostelería y restauración. Sin embargo, Otero destaca la “valentía” de la gente del mar que, a pesar de la menor actividad, continuó trabajando para garantizar el suministro de productos a la ciudadanía. Basilio Otero considera que tanto el pescado como marisco son alimentos que deben llegar a los hogares debido a su algto valor nutricional y energético.

 

Sobre la situación en Arousa, la presidenta del GALP de esta ría, María José Vales, pone de manifiesto la relevancia que el marisqueo tiene en la zona, muy superior a la del resto de la comunidad. Incide en que en estos momentos las mariscadoras están paradas porque "no se pueden garantizar las medidas de seguridad" y porque además no hay demanda para la venta de marisco.

 

Considera que la apertura de la hostelería y la restauración son vitales para la reactivación del marisqueo pero, mientras tanto, reclama la distribución de las ayudas para sostener un sector que da empleo “a muchas familias”.

 

En la provincia de Pontevedra la mayor parte de la actividad de marisqueo está paralizada y tanto la pesca artesanal como las lonjas funcionan al 60% o 70% de su actividad habitual, como explica Javier Martínez, secretario de la Federación Provincial de Cofradías.

 

Martínez incide en que aparte del aspecto económico, la gente del mar también está preocupada por el abastecimiento a la ciudadanía, de ahí que reivindique una mayor atención a las inquietudes del sector, especialmente de las mariscadoras.

 

En A Coruña, la situación varía en función de la cofradía, pero en general se están estableciendo turnos de salidas al mar, ya que debido al descenso de la demanda, no es preciso que toda la flota esté en activo. Mientras que en Lugo la situación es distinta respecto al resto de Galicia debido a sus características propias, sobre todo pesca de altura, bajura y muy poco marisqueo, y también a la mayor duración de la campaña de la caballa, detallan las GALP.

 

La pesca, el marisqueo, la acuicultura marina y el sector transformador de los productos del mar dan trabajo en Galicia a más de 100.000 personas de forma directa o indirecta, y generan una riqueza superior a los 1.100 millones de euros, lo que representa el 2% de la riqueza de Galicia (PIB), según datos de la Xunta.

 

En 2019, en las lonjas y centros de venta de Galicia se comercializaron más de 158.000 toneladas de productos de la pesca que supusieron una facturación de casi 470 millones de euros, según el Anuario de Pesca 2019.

La pesca gallega se reivindica con la campaña #Quedaconosomar