El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, destacó este jueves la seguridad que ofrece a las carreteras gallegas el nuevo dron de la Dirección General de Tráfico.
Así lo ha explicado durante la presentación de esta unidad en el municipio lucense de Guntín, acompañado por la subdelegada en Lugo, Isabel Rodríguez, en la que explicó que el uso de esta aeronave no tripulada es "la gran novedad" de la campaña de verano en el tráfico gallego.
El dron ya pasó por la provincia de Pontevedra, ahora opera en Lugo, seguirá en A Coruña y, en septiembre, está previsto que trabaje en Ourense.
"Siempre (se usará) en tramos de carreteras de alto riesgo de accidentes y con mayor concentración de usuarios vulnerables", explicó Miñones sobre los puntos de actuación, con numerosos accidentes o con alto tránsito de ciclistas, motoristas o peatones.
La aeronave, de tecnología y fabricación española puede operar a 120 metros de altura, alcanzar una velocidad de 80 kilómetros por hora y tiene una autonomía de 40 minutos.
El rango de operación es de 10 kilómetros desde el punto de salida, pero lo habitual es operarlo en el campo de visión de la persona que lo pilota.
El dron funciona como un complemento al trabajo de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico.
La planificación de los puntos a vigilar es fruto de la coordinación entre la Dirección General de Tráfico y el Instituto Armado.
Las infracciones que detecta pueden ser notificadas en el acto por un agente de la Guardia Civil o pueden ser tramitadas de forma posterior.
"Su principal misión es detectar infracciones de riesgo, como conductas temerarias, adelantamientos imprudentes, no respetar señales como un Stop, no usar el cinturón de seguridad o usar el móvil", añadió el delegado del Gobierno, aunque no controla la velocidad de los vehículos.
De hecho, en la jornada del miércoles registró un 50 % de infracciones por saltarse un Stop, un 30 % por uso de móvil y un 20 % por no usar el cinturón.
La meta es "aportar seguridad" en las carreteras gallegas, en las que a estas alturas del año ya se han contabilizado 44 víctimas mortales en 40 accidentes.
Son ocho víctimas menos que en la misma fecha de 2019, pero el delegado recordó que el objetivo es no tener ninguna.
Miñones ha señalado que los datos son "preocupantes", por lo que apela a la prudencia al mismo tiempo que insiste en el mensaje de "tolerancia cero" con las infracciones viales.
Para ello, Tráfico cuenta en Galicia con 600 agentes de la Guardia Civil, más de 300 cámaras, 270 radares, un helicóptero, así como motos y furgonetas camufladas.
"Y todo con un único objetivo: lograr un verano seguro, estamos en el ecuador y hay margen de mejora", destacó Miñones.