La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha advertido hoy a las constructoras de que son las responsables de los daños causados en las carreteras por las que discurrirá la Alta Velocidad a Galicia y, por tanto, quienes deberán "hacer frente" a los gastos, y ha avanzado que en caso de que se nieguen a pagar irán a las "vías jurídicas" para resolver el caso.
Pastor se ha referido con estas palabras a los daños originados por las obras del AVE durante una visita realizada a las carreteras afectadas en la provincia de Ourense, a su paso por Paderne de Allariz, tras la cual ha mantenido una reunión con los alcaldes de las zonas afectadas para darles traslado de la situación actual. En declaraciones a los medios, la ministra ha remarcado que la reparación de los daños es responsabilidad de las empresas constructoras, las cuales en algunos casos se están negando a afrontar los gastos.
El paso de los camiones por algunas de estas carreteras ubicadas en el municipio de Paderne de Allariz y sus zonas limítrofes ha ocasionado numerosos daños en los viales, tanto municipales, como de la Diputación y de la Xunta de Galicia. "La Ley de contratos -junto con los pliegos- prevé que la reparación de todos estos años la tienen que llevar a cabo las empresas constructoras", ha recordado Pastor, quien ha avanzado que el Ministerio ya ha pedido "informes al servicio jurídico" a la vista de que algunas empresas no se quieren hacer responsables. De esta forma, Adif se encargará de acometer las obras "con los informes jurídicos correspondientes".
El coste lo "repercutirán posteriormente a las empresas constructoras" con los daños que han generado, una vía -ha añadido- que no está siendo "nada fácil", tal y como ha apuntado Ana Pastor. Adif ejecutará los trabajos directamente y luego restará esta cuantía a los cobros que tienen pendientes las compañías que se encargan de las obras del AVE.
"A la vista de que muchas de ellas no lo están haciendo (hacerse cargo)", el Gobierno ha pedido "autorización a los servicios técnicos y jurídicos para que se puedan hacer parte de las obras para posteriormente "repercutirlos a las empresas constructoras", ha confirmado Pastor, quien ha avisado de que en caso de que se nieguen a pagar, el Gobierno acudirá a las vías jurídicas necesarias "para que el interés general se defienda, que es lo que estamos haciendo". Actualmente, el Ministerio está a la espera de recibir los informes con los daños existentes, para someterlos a su aprobación, y están pendientes de valoración.
A este respecto, el alcalde de Paderne de Allariz, José Manuel Fernández, ha señalado que los daños en esta localidad se están concentrando en "la carretera Nacional, que va del Polígono de San Cibrao a Xunqueira" por la que transcurre "el Camino de Santiago", lo que la convierte en un lugar con mucho tránsito peatonal. El regidor ha lamentado la inquietud existente en la zona tras asegurar que al no pasar los coches por allí eso está perjudicando al pequeño comercio.
En esta línea, el alcalde de Baños de Molgas, Xaime Iglesias, quien ha agradecido la presencia de la ministra, ha pedido que esto se solucione pronto ante el actual "estado de deterioro de las carreteras". Por otra parte, en lo que se refiere a los tramos pendientes de las obras de Alta Velocidad, que afectan a Ourense, en concreto Taboadela-Seixalbo y Seixalbo-Ourense, Pastor ha aclarado que en el primer caso siguen a la espera del "informe de impacto ambiental" para poder licitar las obras.
El segundo tramo cuenta ya con el "informe favorable" del ayuntamiento orensano, una vez solucionado "el problema de dónde iban los vertederos". Además, preguntada por el proyecto de la futura estación intermodal de Ourense, ha asegurado que su departamento está trabajando "día a día". Asimismo, ha subrayado que los técnicos están trabajando para presentar "un proyecto optimizado" que se pueda llevar adelante y que "va a dar cumplida respuesta a la llegada de la Alta Velocidad a Ourense".
Está previsto que el proyecto esté terminado "a finales de abril". Éste incluye la integración "de la estación de autobuses, estación de tren" junto con el "retranqueo de las vías", que es una obra "muy costosa", además de aparcamiento. Las tres administraciones -central, autonómica y local- están llevando a cabo reuniones periódicas "a tres bandas" para decidir el diseño definitivo.