Los padres británicos que que abusen psicológicamente de sus hijos y no les brinden el cariño y la atención que necesitan, podrían terminar en prisión, con un nuevo proyecto bautizado "Ley Cenicienta". Lo llaman "crueldad emocional contra niños" y podría ser penado con años de cárcel.
La crueldad emocional será un delito equiparable al abuso físico o sexual en ese país, pues los niños deben crecer en un ambiente donde haya amor y dedicación.
El proyecto ‘Cenicienta’ nació de la iniciativa de varias organizaciones de protección de menores y busca dar una solución al maltrato infantil y evitar que los niños crezcan con problemas mentales.
El proyecto en realidad se trata de una modificación a la ley actual sobre crueldad contra los niños, impulsada por una larga campaña del grupo de defensa de los niños Action for Children.
De ser aprobada, la ley le otorgará a la Policía mayores poderes para identificar y lidiar con casos de "crueldad emocional" y buscará penar con hasta diez años de prisión a toda persona que trate a su hijo "de manera que le cause sufrimiento innecesario o perjudique su salud".
Se tipificarça como delito todo tipo de comportamiento por parte de los padres, desde ignorar la presencia del menor, no estimularlo, aterrorizarlo cuando el niño tiene miedo o el caso extremo de provocarle la muerte por falta de alimentación.
También se penará a los padres que impidan el desarrollo "físico, intelectual, emocional, social o de comportamiento" de sus hijos.
La nueva ley que ha sido promovida desde el partido Conservador, podría ser anunciada oficialmente en junio.