La Xunta ha aprobado hoy un Plan de Prevención de Incendios que se mantendrá en vigor hasta marzo de 2024, con un presupuesto de 39 millones de euros. El plan incluye la limpieza de 60.000 hectáreas de terreno, 5.600 kilómetros de pistas forestales y 4.800 puntos de agua.
Para mejorar la prevención de incendios, el gobierno gallego aumentará la vigilancia sobre las parcelas cercanas a las casas que no estén limpias de maleza, y pondrá a disposición del público un visor cartográfico en línea para que los ciudadanos puedan comprobar qué fincas deben limpiar. Además, los brigadistas se encargarán por primera vez de revisar que las parcelas cercanas a las viviendas estén limpias.
El plan también triplicará el número de quemas preventivas de maleza en el monte, mediante la técnica de plantar fuego para reducir la cantidad de combustible disponible y así disminuir el riesgo de incendio y su impacto. Se espera que se quemen 2.200 hectáreas, en comparación con las 700 hectáreas de 2022.
El vicepresidente primero y conselleiro de Economía, Francisco Conde, ha explicado que "la prevención es clave para evitar que se produzcan incendios y reducir su impacto" y ha presidido el Consello de la Xunta en ausencia del presidente Alfonso Rueda, que se encuentra de viaje por Latinoamérica.
