La Fundación Amigos de Galicia, por decisión de su patronato, que preside el pediatra y exprofesor de Medicina de la USC Ramiro José F. Varela Cives, se personará en la causa abierta por los supuestos abusos sexuales de los que habría sido objeto una niña de Monforte de Lemos (Lugo) desde que tenía 10 años, presuntamente con conocimiento de su madre.
Un octogenario, que supuestamente abusó de la niña, y su propia madre, investigada por consentirlo, fueron detenidos y prestaron declaración en sede judicial. De la causa se ha hecho cargo el Juzgado número 2 de Monforte de Lemos, quien los dejó a ambos en libertad con cargos.
“Presumimos que la menor era objeto de total desamparo por parte de las personas que debían protegerla, de una manera especial por la madre, la cual se encuentra en situación de investigada en el procedimiento, por tratarse de un supuesto de autoría o participación en los hechos denunciados, al parecer, por la propia menor”, explica la Fundación en un comunicado.
Se ocupará de la causa, en nombre de la Fundación Amigos de Galicia, el abogado Francisco José Lago, quien también ejerció la acusación popular en el juicio por el asesinato de la niña Desirée Leal, en Muimenta.
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron a un octogenario en la zona de Monforte de Lemos como sospechoso de agredir sexualmente a una niña y a la madre de la menor por consentirlo, según informaron fuentes policiales próximas a la investigación.
Los mismos informadores confirmaron que la investigación se puso en marcha a raíz de la denuncia que realizó la propia menor, que en la actualidad es una adolescente de unos quince años y reside en un centro tutelado.
Los agentes que se hicieron cargo del caso desarrollaron una “larga y ardua investigación”, según las fuentes consultadas, para identificar a la persona o personas que supuestamente habrían abusado de la menor “desde que tenía unos diez años de edad”, con el conocimiento de su propia madre.
Parte de las pesquisas se centraron, precisamente, en identificar a los hombres de avanzada edad que supuestamente “manosearon” a la niña en lugares a los que su propia madre la llevaba. En el transcurso de la investigación, los agentes comprobaron que alguno de ellos habría fallecido ya.
El octogenario detenido fue una de las personas identificadas por los policías que se hicieron cargo de la investigación por agredir sexualmente a la niña. Junto al anciano fue detenida su madre, dado que los encargados del caso consideran que los hechos descritos por la menor no pudieron suceder sin su consentimiento.
