sábado. 20.04.2024

La Audiencia Provincial de Lugo citó para el próximo jueves -día 22 de mayo- al principal imputado en la operación Carioca, José Manuel García Adán, en este caso para conocer la sentencia del juicio que se siguió contra él por los supuestos malos tratos y agresiones sexuales a su exmujer.

 

El Ministerio Fiscal elevó a 31 años de cárcel la petición de pena para José Manuel García Adán en el proceso que se siguió contra él en la Audiencia Provincial de Lugo, entre los días 21 y 24 de abril, por los supuestos malos tratos y agresiones sexuales a su mujer durante los seis años que duró su relación.

 

En su escrito de acusación, la Fiscalía le imputaba a García Adán delitos continuados de agresión sexual y amenazas, así como detención ilegal, malos tratos y violencia habitual, por los que pedía para él una pena de 27 años de prisión y una indemnización de 50.000 euros para la supuesta víctima.

 

Sin embargo, en sus conclusiones definitivas, la fiscal encargada del caso decidió elevar la petición de pena en cuatro años más, hasta un total de 31 años de reclusión, al considerar que en el transcurso del juicio quedó probado otro delito de detención ilegal. Por su parte, el abogado que se hizo cargo de la defensa de García Adán, el letrado Manuel Ortega, pidió para su patrocinado la libre absolución, al considerar que no quedaron probadas en el juicio ninguna de las acusaciones por las que fue procesado el proxeneta.

 

En el juicio, prestaron declaración en la Audiencia Provincial de Lugo una treintena de personas, entre ellas, el propio acusado y la supuesta víctima. Durante el interrogatorio al que fue sometido por la fiscal encargada del caso, García Adán afirmó que la convivencia con su mujer se fue deteriorando porque la supuesta víctima tenía "problemas graves" con el alcohol y con las drogas, por los que incluso llegó a ser atendidas en varias ocasiones en el hospital.

 

El procesado reconoció que ambos discutían con frecuencia, pero aunque como pareja no fueron "un ejemplo para nadie", negó que hubiese pasado nunca a las agresiones físicas, que la hubiese amenazada como un arma o que la obligase a mantener relaciones sexuales con él en contra de su voluntad. La versión que ofreció ante el tribunal la víctima de esos supuestos malos tratos fue totalmente opuesta, dado que narró toda una serie de vejaciones, amenazas, agresiones físicas y psicológicas que se prolongaron durante años y que no llegó a denunciar en su momento porque le tenía "muchísimo miedo".

 

De hecho, la exmujer de García Adán contó que el proxeneta le pegó "por primera vez" cuando estaba embarazada de "siete meses", pero esos episodios de violencia fueron a peor después del nacimiento de su hija, porque le dijo que "ya no tenía" a la niña "en el vientre" y que se la "podía quitar" cuando "le diese la gana".

García Adán conocerá la sentencia de su juicio por malos tratos el 22 de mayo